Génesis, 37:19
Se dijeron unos a otros: —¡Miren, ahí viene el de los sueños!
Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador
Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador.
Se dijeron el uno al otro: —¡Ahí viene el soñador!
Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador
Y dixeron el vno àl otro, He aqui viene el soñador.
Se dijeron unos a otros: —¡Miren, ahí viene el de los sueños!
Se dijeron unos a otros: —¡Miren, ahí viene el de los sueños!
Se dijeron unos a otros: — ¡Ahí viene el de los sueños!
Y se dijeron unos a otros: Aquí viene el soñador.
Se dijeron unos a otros: —Miren, ¡aquí viene el de los sueños!
Se dijeron unos a otros: —¡Ahí viene el de los sueños!
―¡Ahí viene el soñador! —exclamaron—. Vamos, matémoslo y echémoslo en una cisterna. Luego le diremos a nuestro padre que algún animal salvaje se lo comió. ¡Veremos en qué paran sus sueños!
Y se dijeron unos a otros: «Aquí viene el soñador.
—¡Aquí viene el soñador! —dijeron—.
Se dijeron unos a otros: —Ahí viene ese soñador.
Y se dijeron el uno al otro: ¡Aquí viene el soñador!
Se dijeron el uno al otro: —¡Ahí viene el de los sueños!
Se dijeron el uno al otro: «Miren, aquí viene el soñador.
Y dijeron el uno al otro: He aquí viene el soñador
Unos a otros se decían: «¡Vaya, vaya! ¡Aquí viene ese gran soñador!
Unos a otros se decían: «¡Vaya, vaya! ¡Aquí viene ese gran soñador!
Es preciso tomar siempre en cuenta el versículo Génesis, 37:19 de los Textos Sagrados que componen la Biblia de manera que podamos analizarlo y pensar en torno a él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué intentaba manifestarnos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Génesis, 37:19? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida diaria en que tenemos la oportunidad de hacer valer aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Génesis, 37:19 de La Sagrada Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación en relación con el versículo Génesis, 37:19 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por ese motivo es aconsejable acudir al versículo Génesis, 37:19 todas las veces que pueda servirnos de guía para saber cómo proceder o para traer el sosiego a nuestros corazones y almas.
