Tampoco deben presentar al Señor animales con los testículos heridos, golpeados, arrancados o cortados. No practiquen estas cosas en su tierra.
Herido ó magullado, rompido ó cortado, no ofreceréis á Jehová, ni en vuestra tierra lo haréis.
No ofreceréis a Jehová animal con testículos heridos o magullados, rasgados o cortados, ni en vuestra tierra lo ofreceréis.
No ofreceréis a Jehová un animal con testículos heridos o magullados, rasgados o cortados, ni en vuestra tierra lo ofreceréis.
Herido o magullado, roto o cortado, no ofreceréis al SEÑOR, ni en vuestra tierra lo haréis.
Herido, o magullado, rompido o cortado, no offrecereys à Iehoua, ni en vuestra tierra lo hareys.
Tampoco deben presentar al Señor animales con los testículos heridos, golpeados, arrancados o cortados. No practiquen estas cosas en su tierra.
Tampoco deben presentar al Señor animales con los testículos heridos, golpeados, arrancados o cortados. No practiquen estas cosas en su tierra.
No ofrecerán al Señor reses con testículos heridos o magullados, rasgados o extirpados. No harán esto nunca en su tierra.
También cualquier animal con sus testículos magullados, aplastados, rasgados o cortados, no lo ofreceréis al SEÑOR ni lo sacrificaréis en vuestra tierra
»No presenten al SEÑOR ningún animal que tenga los testículos magullados, aplastados, rasgados o cortados. No harán eso en su propia tierra
No ofrecerán al Señor reses con testículos heridos o magullados, rasgados o extirpados. No harán esto nunca en su tierra.
»No se podrá ofrecer al SEÑOR, bajo ninguna circunstancia, un animal que tenga los testículos lastimados, dañados, cortados o arrancados.
También cualquier animal con sus testículos magullados, aplastados, rasgados o cortados, no lo ofrecerán al SEÑOR ni lo sacrificarán en su tierra
Tampoco presentarás al SEÑOR un animal que tenga los testículos dañados o que esté castrado. No harás esto en tu propia tierra
No ofrecerán al SEÑOR ningún animal con los testículos lastimados, magullados, cortados o arrancados. No harán esto en su tierra.
No ofrecerán a YAVé animal que tenga los testículos aplastados, magullados, rasgados o cortados. No harán esto en su tierra.
“No ofrecerán al SEÑOR un animal con los testículos heridos o dañados, arrancados o cortados. No harán esto en su tierra
»No me ofrezcan ningún animal con testículos heridos o magullados, rasgados o extirpados. No ofrezcan en su tierra esta clase de animales.
Herido ó magullado, rompido ó cortado, no ofreceréis á Jehová, ni en vuestra tierra lo haréis.
Tampoco me ofrezcan animales que tengan los testículos aplastados, hundidos, cortados o arrancados. Si el ternero o el cordero que van a ofrecerme está deforme, podrán presentarlo como ofrenda volunta
Tampoco me ofrezcan animales que tengan los testículos aplastados, hundidos, cortados o arrancados. Si el ternero o el cordero que van a ofrecerme está deforme, podrán presentarlo como ofrenda volunta
Deberíamos tomar continuamente en consideración el versículo Levítico, 22:24 de La Santa Biblia con el fin de reflexionar en torno a él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué pretendía decirnos el Señor con el versículo Levítico, 22:24? ¿En qué coyunturas de nuestra vida cotidiana podemos llevar a la práctica aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Levítico, 22:24 de La Sagrada Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación en relación con el versículo Levítico, 22:24 nos es de gran ayuda a ser mejores personas y a acercarnos más a Dios, por eso es oportuno apoyarse en el versículo Levítico, 22:24 en todas aquellas ocasiones en que nos pueda servir de guía de modo que podamos saber qué pasos dar o para traer la serenidad a nuestros corazones.