Pues entró en la casa de Dios y comieron los panes consagrados a Dios, los cuales no les estaba permitido comer ni a él ni a sus compañeros, sino solamente a los sacerdotes.
Cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no le era lícito comer, ni á los que estaban con él, sino á solos los sacerdotes?
cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no les era lícito comer ni a él ni a los que con él estaban, sino solamente a los sacerdotes?
cómo entró en la casa de Dios y comió los panes de la proposición, que no les estaba permitido comer ni a él ni a los que con él estaban, sino solamente a los sacerdotes?
cómo entró en la Casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no le era lícito comer, ni a los que estaban con él, sino sólo a los sacerdotes?
Como entró en la Caſa de Dios, y comio los panes de la Proposicion, que no le era licito comer deellos ni à los que estauã con el; ſino à solos los sacerdotes?
Pues entró en la casa de Dios y comieron los panes consagrados a Dios, los cuales no les estaba permitido comer ni a él ni a sus compañeros, sino solamente a los sacerdotes.
Pues entró en la casa de Dios y comieron los panes consagrados a Dios, los cuales no les estaba permitido comer ni a él ni a sus compañeros, sino solamente a los sacerdotes.
Entró en la casa de Dios y comió de los panes de la ofrenda, algo que no les estaba permitido comer ni a él ni a sus compañeros, sino solamente a los sacerdotes.
cómo entró en la casa de Dios y comieron los panes consagrados, que no les era lícito comer, ni a él ni a los que estaban con él, sino solo a los sacerdotes?
Él entró a la casa de Dios, y él y sus compañeros se comieron los panes que se consagran a Dios. Y ustedes bien saben que no se permitía ni a él ni a sus compañeros comer de esos panes. Eran sólo para
Entró en la casa de Dios y comieron de los panes de la ofrenda, algo que no les estaba permitido comer ni a él ni a sus compañeros, sino solamente a los sacerdotes.
Pues entraron al templo y se comieron los panes de la proposición, panes sagrados que sólo los sacerdotes podían comer.
cómo entró en la casa de Dios y comieron los panes consagrados, que no les era lícito comer, ni a él ni a los que estaban con él, sino solo a los sacerdotes?
Entró en la casa de Dios, y él y sus compañeros violaron la ley al comer los panes sagrados, que solo a los sacerdotes se les permitía comer.
Entró en la casa de Dios, y él y sus compañeros comieron los panes consagrados a Dios, lo que no se les permitía a ellos, sino solo a los sacerdotes.
cómo entró en la Casa de Dios, y comieron los Panes de la Presentación, de los cuales no le era lícito comer a él ni a los que estaban con él, sino solo a los sacerdotes?
cómo entró en la casa de Dios y comieron los panes de la Presencia, que no les era lícito comer ni a él ni a los que estaban con él, sino solo a los sacerdotes?
¡Pues entró en la casa de Dios y comió los panes de la proposición! Panes que ni a él ni a sus acompañantes les estaba permitido comer, sino solamente a los sacerdotes.
Cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no le era lícito comer, ni á los que estaban con él, sino á solos los sacerdotes¿
Entraron en la casa de Dios y comieron el pan sagrado. Ni a David ni a sus compañeros les estaba permitido comer ese pan. Solo los sacerdotes podían comerlo.
Entraron en la casa de Dios y comieron el pan sagrado. Ni a David ni a sus compañeros les estaba permitido comer ese pan. Solo los sacerdotes podían comerlo.
Es preciso tomar en todo momento en consideración el versículo San Mateo, 12:4 de La Biblia con el propósito de reflexionar acerca de él.Tal vez sería bueno preguntarse ¿Qué pretendía manifestarnos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo San Mateo, 12:4? ¿En qué momentos de nuestro día a día tenemos la oportunidad de recurrir a lo que hemos llegado a saber gracias al versículo San Mateo, 12:4 de Las Sagradas Escrituras?
El hecho de reflexionar sobre el versículo San Mateo, 12:4 nos supone una ayuda a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, ese es el motivo por el cual es útil acudir al versículo San Mateo, 12:4 en todas aquellas ocasiones en que nos pueda servir de guía de modo que podamos saber cómo proceder o para traer el sosiego a nuestros corazones y almas.