«Oigan esto: Un sembrador salió a sembrar.
Oid: He aquí, el sembrador salió á sembrar.
Oíd: He aquí, el sembrador salió a sembrar
—Oíd: El sembrador salió a sembrar
Oíd: He aquí, el sembrador salió a sembrar.
Oyd: Heaqui, elque sembraua, ſalió à sembrar.
«Oigan esto: Un sembrador salió a sembrar.
«Oigan esto: Un sembrador salió a sembrar.
— Escuchen: Una vez, un sembrador salió a sembrar.
¡Oíd! He aquí, el sembrador salió a sembrar
«¡Escuchen bien! El sembrador salió a sembrar.
—Escuchen: Una vez, un sembrador salió a sembrar.
«Pongan atención. Un sembrador salió a sembrar.
«Escuchen: El sembrador salió a sembrar
«¡Escuchen! Un agricultor salió a sembrar.
«¡Pongan atención! Un sembrador salió a sembrar.
Oigan. El sembrador salió a sembrar.
“¡Oigan! He aquí un sembrador salió a sembrar.
«Presten atención. Resulta que un sembrador salió a sembrar.
Oid: He aquí, el sembrador salió á sembrar.
«Escuchen bien esto: Un campesino salió a sembrar trigo.
«Escuchen bien esto: Un campesino salió a sembrar trigo.
Deberíamos tomar constantemente en consideración el versículo San Marcos, 4:3 de La Sagrada Biblia de manera que podamos meditar acerca de él.Seguramente sería adecuado preguntarse ¿Qué intentaba manifestarnos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo San Marcos, 4:3? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida diaria en que seremos capaces de poner en práctica aquello que hemos aprendido gracias al versículo San Marcos, 4:3 de la Santa Biblia?
El hecho de reflexionar en relación con el versículo San Marcos, 4:3 es un gran aporte que nos permite a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa cuestión es bueno recurrir al versículo San Marcos, 4:3 todas y cada una de las veces que necesitemos una luz que nos guíe de modo que podamos saber cómo actuar o para traer la paz a nuestras almas.