8 (9) Señor, por causa de mis enemigos guíame en tu justicia, llévame por el buen camino.
Guíame, Jehová, en tu justicia á causa de mis enemigos; Endereza delante de mí tu camino.
Guíame, Jehová, en tu justicia, a causa de mis enemigos; Endereza delante de mí tu camino.
Guíame, Jehová, en tu justicia, a causa de mis enemigos; endereza delante de mí tu camino.
Guíame, SEÑOR, en tu justicia a causa de mis enemigos; endereza delante de mí tu camino.
Y yo en la multitud de tu misericordia entraré en tu Caſa: adoraré àl sancto Templo tuyo con tu temor.
En cambio yo, por tu gran amor, puedo entrar en tu templo; ¡puedo adorarte con toda reverencia mirando hacia tu santo templo!
8 (9) Señor, por causa de mis enemigos guíame en tu justicia, llévame por el buen camino.
Pero yo, por tu inmenso amor, acudiré a tu morada y me postraré venerándote en tu santuario.
SEÑOR, guíame en tu justicia por causa de mis enemigos; allana delante de mí tu camino.
SEÑOR, ayúdame a llevar una vida justa aunque mis enemigos me acechen a cada instante. Haz que sea fácil para mí vivir de la manera que tú quieres.
Señor, guíame con tu justicia porque tengo enemigos, allana ante mí tu camino.
SEÑOR, guíame como lo has prometido; de otro modo, caeré bajo mis enemigos. Dime claramente qué debo hacer, qué camino tomar.
¶SEÑOR, guíame en Tu justicia por causa de mis enemigos; Allana delante de mí Tu camino.
Guíame por el camino correcto, oh SEÑOR, o mis enemigos me conquistarán; allana tu camino para que yo lo siga.
SEÑOR, por causa de mis enemigos, dirígeme en tu justicia; empareja delante de mí tu senda.
Guíame, oh YAVÉ, en tu justicia, A causa de mis adversarios. Allana tu camino delante de mí.
Guíame, oh SEÑOR, en tu justicia a causa de mis enemigos. Endereza tu camino delante de mí.
Guíame, Señor, en tu justicia, y por causa de mis adversarios endereza tu camino delante de mí.
Guíame, Jehová, en tu justicia á causa de mis enemigos; Endereza delante de mí tu camino.
8 (9) Dios mío, ¡enséñame a hacer el bien! ¡Llévame por el buen camino, pues no quiero que mis enemigos triunfen sobre mí!
8 (9) Dios mío, ¡enséñame a hacer el bien! ¡Llévame por el buen camino, pues no quiero que mis enemigos triunfen sobre mí!
El versiculo Salmos, 5:8 de los Textos Sagrados que componen la Biblia consiste en algo que es muy recomendable tomar constantemente en consideración con el propósito de hacer una reflexión sobre él. Acaso deberíamos preguntarnos ¿Qué pretendía proponernos Dios con el versículo Salmos, 5:8? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida cotidiana en que podemos aplicar lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Salmos, 5:8 de Las Sagradas Escrituras?
Reflexionar en relación con el versículo Salmos, 5:8 nos supone una ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, esa es la razón por la cual es oportuno servirse del versículo Salmos, 5:8 cuando creamos que nos pueda servir de guía para saber en qué forma acturar o para traer la tranquilidad a nuestros corazones y almas.