10 (11) Yo soy el Señor, tu Dios, el que te sacó de la tierra de Egipto; abre tu boca, y yo te satisfaré.
Yo soy Jehová tu Dios, Que te hice subir de la tierra de Egipto: Ensancha tu boca, y henchirla he.
Yo soy Jehová tu Dios, Que te hice subir de la tierra de Egipto; Abre tu boca, y yo la llenaré.
Yo soy Jehová tu Dios, que te hice subir de la tierra de Egipto; abre tu boca y yo la llenaré.
Yo soy el SEÑOR tu Dios, que te hice subir de la tierra de Egipto; abre tu boca, y yo la llenaré.
No aurá enti dios ageno: ni te encoruarás à dios estraño.
No tengas dioses extranjeros; no adores dioses extraños.
10 (11) Yo soy el Señor, tu Dios, el que te sacó de la tierra de Egipto; abre tu boca, y yo te satisfaré.
No tengas junto a ti a un dios extraño, no rindas culto a un dios ajeno.
Yo, el SEÑOR, soy tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto; abre bien tu boca y la llenaré.
Yo soy el SEÑOR tu Dios, que te sacó de Egipto. Abre tu boca y yo te alimentaré.
Yo soy Dios, tu Señor, quien te sacó de la tierra de Egipto. ¡Abre tu boca y yo te saciaré!
Yo soy el SEÑOR tu Dios, quien te sacó de la tierra de Egipto. ¡Pruébame! Abre bien la boca, y verás si no la lleno. ¡Recibirás toda la bendición que necesites!
Yo, el SEÑOR, soy tu Dios, Que te saqué de la tierra de Egipto; Abre bien tu boca y la llenaré.
Pues fui yo, el SEÑOR tu Dios, quien te rescató de la tierra de Egipto. Abre bien tu boca, y la llenaré de cosas buenas.
Yo soy el SEÑOR tu Dios, que te hice subir de la tierra de Egipto. Abre bien la boca, y te la llenaré.
Yo soy YAVé, Tu ʼELOHIM, El que te sacó de la tierra de Egipto. ¡Abre tu boca, y Yo la llenaré!
Yo soy el SEÑOR tu Dios, que te hice venir de la tierra de Egipto. Abre bien tu boca, y la llenaré.
Yo soy el Señor, tu Dios; yo te saqué de la tierra de Egipto. Abre la boca, y yo te daré de comer.
Yo soy Jehová tu Dios, Que te hice subir de la tierra de Egipto: Ensancha tu boca, y henchirla he.
10 (11) Yo soy tu Dios; yo te saqué de Egipto. Dime qué quieres comer, y te lo daré de sobra.
10 (11) Yo soy tu Dios; yo te saqué de Egipto. Dime qué quieres comer, y te lo daré de sobra.
El versiculo Salmos, 81:10 de La Sagrada Biblia consiste en algo que es preciso tomar constantemente en consideración con la finalidad de analizarlo y pensar en torno a él.Quizás sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía manifestarnos Dios con el versículo Salmos, 81:10? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana tenemos la oportunidad de recurrir a lo que hemos aprendido gracias al versículo Salmos, 81:10 de la Santa Biblia?
Hacer un análisis profundo acerca de el versículo Salmos, 81:10 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a acercarnos más a Dios, por esa razón es oportuno servirse del versículo Salmos, 81:10 siempre que pueda servirnos de guía de modo que podamos saber cómo actuar o para traer la tranquilidad a nuestras almas.