<

Romanos, 4:2

>

Romanos, 4:2

En realidad, si Abraham hubiera sido reconocido como justo a causa de sus propios hechos, tendría razón para gloriarse, aunque no delante de Dios.


Que si Abraham fué justificado por la obras, tiene de qué gloriarse; mas no para con Dios.


Porque si Abraham fue justificado por las obras, tiene de qué gloriarse, pero no para con Dios.


Si Abraham hubiera sido justificado por las obras, tendría de qué gloriarse, pero no ante Dios


Que si Abraham fue justificado por la obras, tiene de qué gloriarse; mas no para con Dios.


Que ſi Abrahã fue justificado por las obras, tiene gloria; mas no acerca de Dios.


En realidad, si Abraham hubiera sido reconocido como justo a causa de sus propios hechos, tendría razón para gloriarse, aunque no delante de Dios.


En realidad, si Abraham hubiera sido reconocido como justo a causa de sus propios hechos, tendría razón para gloriarse, aunque no delante de Dios.


Si Abrahán hubiese obtenido la amistad divina en virtud de sus obras, tendría razón para sentirse orgulloso. Aunque nunca ante Dios.


Porque si Abraham fue justificado por las obras, tiene de qué jactarse, pero no para con Dios.


Si Abraham llegó a ser aprobado por Dios por lo que hizo, entonces podía presumir de algo, pero no delante de Dios.


Si Abrahán hubiese sido justificado en virtud de sus obras, tendría razón para sentirse orgulloso. Aunque nunca ante Dios.


Si Dios lo hubiera hecho justo por las buenas obras que realizó, tendría motivos para sentirse orgulloso, aunque no ante de Dios.


Porque si Abraham fue justificado por las obras, tiene de qué jactarse, pero no para con Dios.


Que si sus buenas acciones le hubieran servido para que Dios lo aceptara, habría tenido de qué jactarse; pero esa no era la forma de actuar de Dios.


En realidad, si Abraham hubiera sido justificado por las obras, habría tenido de qué jactarse, pero no delante de Dios.


Porque si Abraham fue declarado justo por las obras, tiene de qué enaltecerse, pero no ante Dios.


Porque si Abraham fue justificado por las obras tiene de qué gloriarse, pero no delante de Dios.


Porque si Abrahán hubiera sido justificado por las obras, tendría de qué jactarse, pero no delante de Dios.


Que si Abraham fué justificado por la obras, tiene de qué gloriarse; mas no para con Dios.


Si Dios lo hubiera aceptado por todo lo que hizo, entonces podría sentirse orgulloso ante nosotros. Pero ante Dios no podía sentirse orgulloso de nada.


Si Dios lo hubiera aceptado por todo lo que hizo, entonces podría sentirse orgulloso ante nosotros. Pero ante Dios no podía sentirse orgulloso de nada.


El versiculo Romanos, 4:2 de La Biblia consiste en algo que nos conviene tener constantemente presente para hacer una reflexión acerca de él. ¿Qué quiso proponernos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Romanos, 4:2? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que seremos capaces de hacer valer aquello que aprendemos gracias al versículo Romanos, 4:2 de la Santa Biblia?

Meditar en torno a lo que se refiere el versículo Romanos, 4:2 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, por eso es conveniente recurrir al versículo Romanos, 4:2 todas las veces que necesitemos una luz que nos guíe de modo que podamos saber cómo actuar o para traer el sosiego a nuestros corazones.