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Cantares, 7:4

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Cantares, 7:4

4 (5) Tu cuello es una torre de marfil; tus ojos son dos estanques de la ciudad de Hesbón, junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz es como la torre del Líbano que mira hacia la ciudad de Damasco.


Tu cuello, como torre de marfil; Tus ojos, como las pesqueras de Hesbón junto á la puerta de Bat-rabbim; Tu nariz, como la torre del Líbano, Que mira hacia Damasco.


Tu cuello, como torre de marfil; Tus ojos, como los estanques de Hesbón junto a la puerta de Bat-rabim; Tu nariz, como la torre del Líbano, Que mira hacia Damasco.


Tu cuello, como torre de marfil; tus ojos, como los estanques de Hesbón junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz, como la torre del Líbano, que mira hacia Damasco.


Tu cuello, es como torre de marfil; tus ojos, como las pesqueras de Hesbón junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz, como la torre del Líbano, que mira hacia Damasco.


Tu cuello, como torre de marfil: tus ojos como las pesqueras de Esebon junto à la puerta de Bath-rabbim tu nariz, como la torre del Libano, que mira hazia Damasco.


Tus pechos son dos gacelas, dos gacelas mellizas.


4 (5) Tu cuello es una torre de marfil; tus ojos son dos estanques de la ciudad de Hesbón, junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz es como la torre del Líbano que mira hacia la ciudad de Damasco.


Tus dos pechos son dos crías mellizas de gacela.


Tu cuello, como torre de marfil, tus ojos, como los estanques en Hesbón junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz, como la torre del Líbano que mira hacia Damasco.


Tu cuello es largo y fino como una torre de marfil. Tus ojos son claros como las piscinas de Hesbón, junto a la entrada de Bat Rabín. Tu nariz es tan perfecta como la torre del Líbano que mira directa


Tus dos pechos son dos crías mellizas de gacela.


tu cuello parece torre de marfil, tus ojos, los manantiales de Hesbón junto a la entrada de Bat Rabín. Tu nariz es bella como la torre del Líbano que mira hacia Damasco.


Tu cuello, como torre de marfil, Tus ojos, como los estanques en Hesbón Junto a la puerta de Bat Rabim; Tu nariz, como la torre del Líbano Que mira hacia Damasco.


Tu cuello es tan hermoso como una torre de marfil. Tus ojos son como los manantiales cristalinos de Hesbón, junto a la puerta de Bat-rabim. Tu nariz es tan fina como la torre del Líbano con vista a Da


Tu cuello parece torre de marfil. Tus ojos son los manantiales de Hesbón, junto a la entrada de Bat Rabín. Tu nariz se asemeja a la torre del Líbano, que mira hacia Damasco.


Tu cuello, una torre de marfil, Tus ojos, claros como los estanques de Hesbón, Junto al portal de Bat-rabim. Tu perfil es como la torre del Líbano, Que mira hacia Damasco.


Tu cuello es como torre de marfil. Tus ojos son como los estanques en Hesbón, en la puerta de Bat-rabim. Tu nariz es como la torre del Líbano que mira hacia Damasco.


y tu cuello, una torre de marfil. Me hacen pensar tus ojos en los manantiales de Jesbón que fluyen a la entrada de Bat Rabín. Tu nariz se asemeja a la torre del Líbano, orientada hacia Damasco.


Tu cuello, como torre de marfil; Tus ojos, como las pesqueras de Hesbón junto á la puerta de Bat-rabbim; Tu nariz, como la torre del Líbano, Que mira hacia Damasco.


4 (5) tu cuello me recuerda a una torre de marfil. Tienen tus ojos el brillo de los manantiales de Hesbón. Afilada es tu nariz, como la torre del Líbano orientada hacia Damasco.


4 (5) tu cuello me recuerda a una torre de marfil. Tienen tus ojos el brillo de los manantiales de Hesbón. Afilada es tu nariz, como la torre del Líbano orientada hacia Damasco.


El versiculo Cantares, 7:4 de los Textos Sagrados que componen la Biblia es algo que es aconsejable tomar en todo momento en cuenta con la finalidad de analizarlo y pensar en torno a él.Quizás deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué pretendía proponernos Dios Padre con el versículo Cantares, 7:4? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria podemos aplicar aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo Cantares, 7:4 de La Biblia?

El hecho de reflexionar sobre el versículo Cantares, 7:4 nos es de gran ayuda a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es oportuno servirse del versículo Cantares, 7:4 en todas aquellas ocasiones en que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir para saber en qué forma acturar o para traer la tranquilidad a nuestros corazones y almas.