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2 Corintios, 3:6

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2 Corintios, 3:6

pues él nos ha capacitado para ser servidores de una nueva alianza, basada no en una ley, sino en la acción del Espíritu. La ley condena a muerte, pero el Espíritu de Dios da vida.


El cual asimismo nos hizo ministros suficientes de un nuevo pacto: no de la letra, mas del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.


el cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.


el cual asimismo nos capacitó para ser ministros de un nuevo pacto, no de la letra, sino del Espíritu, porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.


¶ el cual aun nos hizo que fuéramos ministros suficientes del Nuevo Testamento, no de la letra, sino del Espíritu; porque la letra mata, mas el Espíritu vivifica.


Elqual aũ nos hizo que fuessemos ministros sussicientes del Nueuo Teſtamento: no de la Letra, mas del Eſpiritu: porque la Letra mata, mas el Eſpiritu viuifica.


pues él nos ha capacitado para ser servidores de una nueva alianza, basada no en una ley, sino en la acción del Espíritu. La ley condena a muerte, pero el Espíritu de Dios da vida.


pues él nos ha capacitado para ser servidores de una nueva alianza, basada no en una ley, sino en la acción del Espíritu. La ley condena a muerte, pero el Espíritu de Dios da vida.


Él fue quien nos capacitó para ser ministros de una alianza nueva, basada no en la letra de la ley, sino en la fuerza del Espíritu; y la letra de la ley es causa de muerte, mientras que el Espíritu lo


el cual también nos hizo suficientes como ministros de un nuevo pacto, no de la letra, sino del Espíritu; porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.


Sólo Dios nos hace capaces de ser sus siervos del nuevo pacto que él ha hecho con su pueblo. Este nuevo pacto no está basado en una ley escrita, sino en el Espíritu, porque la ley escrita lleva a la m


Él fue quien nos capacitó para ser ministros de una alianza nueva, basada no en la letra de la ley, sino en la fuerza del Espíritu; y la letra de la ley es causa de muerte, mientras que el Espíritu lo


Él nos ha capacitado para que seamos siervos del nuevo pacto, no basado en la ley sino en la obra del Espíritu, porque la ley condena a muerte, pero el Espíritu da vida.


el cual también nos hizo suficientes como ministros de un nuevo pacto, no de la letra, sino del Espíritu. Porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.


Él nos capacitó para que seamos ministros de su nuevo pacto. Este no es un pacto de leyes escritas, sino del Espíritu. El antiguo pacto escrito termina en muerte; pero, de acuerdo con el nuevo pacto,


Él nos ha capacitado para ser servidores de un nuevo pacto, no el de la letra, sino el del Espíritu; porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.


Él también nos hizo ministros del Nuevo Pacto, no de la letra, sino del Espíritu. Porque la letra mata, pero el Espíritu da vida.


Él mismo nos capacitó como ministros del nuevo pacto, no de la letra, sino del Espíritu. Porque la letra mata, pero el Espíritu vivifica.


pues él nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del Espíritu; porque la letra mata, pero el Espíritu vivifica.


El cual asimismo nos hizo ministros suficientes de un nuevo pacto: no de la letra, mas del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica.


Ahora Dios nos ha preparado para que anunciemos a todos nuestro nuevo compromiso con él. Este nuevo compromiso no se apoya en la ley, sino en el Espíritu de Dios. Porque la ley condena a muerte al pec


Ahora Dios nos ha preparado para que anunciemos a todos nuestro nuevo compromiso con él. Este nuevo compromiso no se apoya en la ley, sino en el Espíritu de Dios. Porque la ley condena a muerte al pec


Es preciso tomar constantemente en consideración el versículo 2 Corintios, 3:6 de La Biblia para hacer una reflexión acerca de él. Acaso deberíamos preguntarnos ¿Qué intentaba proponernos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo 2 Corintios, 3:6? ¿En qué coyunturas de nuestra vida cotidiana podemos poner en práctica aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo 2 Corintios, 3:6 de La Sagrada Biblia?

Discurrir y recapacitar acerca de el versículo 2 Corintios, 3:6 nos es de gran ayuda a ser mejores personas y a aproximarnos más a Dios, por eso es bueno servirse del versículo 2 Corintios, 3:6 todas las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestro espíritu.