2 Corintios, 3:8
¡cuánta más será la gloria del anuncio de una nueva alianza fundada en el Espíritu!
¿Cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu?
¿cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu?
¿cómo no será más bien con gloria el ministerio del Espíritu?
¿Cómo no será para mayor gloria el ministerio del Espíritu?
Como no ſerá para mayor gloria el ministerio del Eſpiritu?
¡cuánta más será la gloria del anuncio de una nueva alianza fundada en el Espíritu!
¡cuánta más será la gloria del anuncio de una nueva alianza fundada en el Espíritu!
¿no será mucho más glorioso lo que es instrumento del Espíritu?
¿cómo no será aún con más gloria el ministerio del Espíritu?
¿Acaso no tendría más gloria el trabajo al servicio del nuevo pacto que lleva al Espíritu?
¿no será mucho más glorioso lo que es instrumento del Espíritu?
¿No debemos esperar una gloria mucho mayor en estos días del ministerio del Espíritu Santo?
¿cómo no será aún con más gloria el ministerio del Espíritu?
¿No deberíamos esperar mayor gloria dentro del nuevo camino, ahora que el Espíritu Santo da vida?
Pues bien, si aquel ministerio fue así, ¿no será todavía más glorioso el ministerio del Espíritu?
¿cómo no será con más resplandor el ministerio del Espíritu?
¡cómo no será con mayor gloria el ministerio del Espíritu!
¿no será más glorioso aún el ministerio del Espíritu?
¿Cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu?
Dios escribió la ley en tablas de piedra, y se la entregó a Moisés. Aquel momento fue tan grandioso, que la cara de Moisés resplandecía. Y el resplandor era tan fuerte que los israelitas no podían mir
Dios escribió la ley en tablas de piedra, y se la entregó a Moisés. Aquel momento fue tan grandioso, que la cara de Moisés resplandecía. Y el resplandor era tan fuerte que los israelitas no podían mir
El versiculo 2 Corintios, 3:8 de La Biblia es algo que debemos tomar continuamente en consideración con el fin de hacer una reflexión sobre él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué intentaba decirnos Dios Nuestro Señor con el versículo 2 Corintios, 3:8? ¿En qué momentos de nuestro día a día seremos capaces de hacer valer aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo 2 Corintios, 3:8 de La Sagrada Biblia?
El hecho de reflexionar en relación con el versículo 2 Corintios, 3:8 nos supone una ayuda a ser mejores personas y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por ese motivo es bueno servirse del versículo 2 Corintios, 3:8 todas y cada una de las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir para saber cómo proceder o para traer paz a nuestros corazones.
