Entonces Ananías, que era sumo sacerdote, mandó a los que estaban cerca de Pablo que le pegaran en la boca.
El príncipe de los sacerdotes, Ananías, mandó entonces á los que estaban delante de él, que le hiriesen en la boca.
El sumo sacerdote Ananías ordenó entonces a los que estaban junto a él, que le golpeasen en la boca.
El sumo sacerdote Ananías ordenó entonces a los que estaban junto a él que lo golpearan en la boca.
El príncipe de los sacerdotes, Ananías, mandó entonces a los que estaban delante de él, que le hirieran en la boca.
El Principe de los Sacerdotes Ananias entonces mandó à losque eſtauan delãte deel, que lo hirieſſen en la boca.
Entonces Ananías, que era sumo sacerdote, mandó a los que estaban cerca de Pablo que le pegaran en la boca.
Entonces Ananías, que era sumo sacerdote, mandó a los que estaban cerca de Pablo que le pegaran en la boca.
A esto, Ananías, el sumo sacerdote, ordenó a los ujieres que golpearan a Pablo en la boca.
Y el sumo sacerdote Ananías ordenó a los que estaban junto a él, que lo golpearan en la boca.
Entonces Ananías, el sumo sacerdote, les ordenó a los que estaban allí cerca de Pablo, que lo golpearan en la boca.
A esto, Ananías, el sumo sacerdote, ordenó a los asistentes que golpearan a Pablo en la boca.
Entonces el jefe de los sacerdotes, Ananías, ordenó a los que estaban cerca de Pablo, que lo golpearan en la boca.
Y el sumo sacerdote Ananías ordenó a los que estaban junto a él, que lo golpearan en la boca.
Al instante, Ananías, el sumo sacerdote, ordenó a los que estaban cerca de Pablo que lo golpearan en la boca.
Ante esto, el sumo sacerdote Ananías ordenó a los que estaban cerca de Pablo que lo golpearan en la boca.
Pero el sumo sacerdote Ananías mandó a los que estaban junto a él que le golpearan la boca.
Y el sumo sacerdote Ananías mandó a los que estaban a su lado, que le golpearan en la boca.
Entonces Ananías, que era el sumo sacerdote, ordenó a los que estaban junto a él que lo golpearan en la boca
El príncipe de los sacerdotes, Ananías, mandó entonces á los que estaban delante de él, que le hiriesen en la boca.
Entonces Ananías, el jefe de los sacerdotes, ordenó que golpearan a Pablo en la boca.
Entonces Ananías, el jefe de los sacerdotes, ordenó que golpearan a Pablo en la boca.
Es preciso tener en todo momento presente el versículo Hechos, 23:2 de La Sagrada Biblia con el objetivo de meditar sobre él.Quizás sería acertado cuestionarse ¿Qué trataba de proponernos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo Hechos, 23:2? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida diaria en que seremos capaces de poner en práctica aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Hechos, 23:2 de La Biblia?
Reflexionar acerca de el versículo Hechos, 23:2 nos es de gran ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a aproximarnos más a Dios, esa es la cuestión por la cual es aconsejable servirse del versículo Hechos, 23:2 cuando creamos que necesitemos una luz que nos guíe para saber qué pasos dar o para traer la serenidad a nuestros corazones.