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Jeremías, 20:9

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Jeremías, 20:9

Si digo: «No pensaré más en el Señor, no volveré a hablar en su nombre», entonces tu palabra en mi interior se convierte en un fuego que devora, que me cala hasta los huesos. Trato de contenerla, pero


Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre: empero fué en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos, trabajé por sufrirlo, y no pude.


Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre; no obstante, había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo, y no pude.


Por eso dije: «¡No me acordaré más de él ni hablaré más en su nombre!» No obstante, había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos. Traté de resistirlo, pero no pude.


Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre. Pero, fue en mi corazón como un fuego ardiente y metido en mis huesos; trabajé por sufrirlo, y no pude.


Y dixe, No me acordaré mas deel, ni mas hablaré en ſu nombre: Y fue en mi coraçon como vn fuego ardiente metido en mis hueſſos: y trabajé por suffrirlo, y no pude.


Si digo: «No pensaré más en el Señor, no volveré a hablar en su nombre», entonces tu palabra en mi interior se convierte en un fuego que devora, que me cala hasta los huesos. Trato de contenerla, pero


Si digo: «No pensaré más en el Señor, no volveré a hablar en su nombre», entonces tu palabra en mi interior se convierte en un fuego que devora, que me cala hasta los huesos. Trato de contenerla, pero


Me decía: No me acordaré más de él, no hablaré más en su nombre. Pero algo ardía en mi corazón como fuego, algo ardiente encerrado en mis huesos, que trataba inútilmente de apagar.


Pero si digo: No le recordaré ni hablaré más en su nombre, esto se convierte dentro de mí como fuego ardiente encerrado en mis huesos; hago esfuerzos por contenerlo, y no puedo.


Yo dije: «Ya no anunciaré más de él; no volveré a hablar en su nombre», pero su mensaje dentro de mí se convierte en un fuego ardiente que me cala hasta los huesos. Hago todo lo que puedo por contener


Me decía: No me acordaré más de él, no hablaré más en su nombre. Pero algo ardía en mi corazón como fuego, algo ardiente encerrado en mis huesos, que trataba inútilmente de apagar.


¡Y no puedo renunciar! Porque si digo que nunca más volveré a mencionar al SEÑOR, que nunca más hablaré en su representación, empiezo a sentir tu palabra como si fuera lumbre que me quema por dentro y


Pero si digo: «No lo recordaré Ni hablaré más en Su nombre», Esto se convierte dentro de mí como fuego ardiente Encerrado en mis huesos. Hago esfuerzos por contenerlo, Y no puedo.


Sin embargo, si digo que nunca mencionaré al SEÑOR o que nunca más hablaré en su nombre, su palabra arde en mi corazón como fuego. ¡Es como fuego en mis huesos! ¡Estoy agotado tratando de contenerla!


Si digo: «No me acordaré más de él ni hablaré más en su nombre»; entonces su palabra es en mi corazón como un fuego, un fuego ardiente que penetra hasta los huesos. He hecho todo lo posible por conten


Y si digo: No lo recordaré a Él, ni hablaré más en su Nombre, entonces mi corazón es como un fuego abrasador encerrado en mis huesos. Me esfuerzo en contenerlo, pero no puedo.


Digo: “No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre”. Pero hay en mi corazón como un fuego ardiente, apresado en mis huesos. Me canso de contenerlo y no puedo.


Me había propuesto no pensar más en ti, ni hablar más en tu nombre, ¡pero en mi corazón se prendía un fuego ardiente que me calaba hasta los huesos! Traté de soportarlo, pero no pude.


Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre: empero fué en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos, trabajé por sufrirlo, y no pude.


»Hay días en que quisiera no acordarme más de ti ni anunciar más tus mensajes; pero tus palabras arden dentro de mí; ¡son un fuego que me quema hasta los huesos! He tratado de no hablar, ¡pero no me p


»Hay días en que quisiera no acordarme más de ti ni anunciar más tus mensajes; pero tus palabras arden dentro de mí; ¡son un fuego que me quema hasta los huesos! He tratado de no hablar, ¡pero no me p


Es aconsejable tomar continuamente en cuenta el versículo Jeremías, 20:9 de La Biblia con el objetivo de meditar sobre él.Probablemente deberíamos preguntarnos ¿Qué pretendía proponernos el Señor con el versículo Jeremías, 20:9? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que seremos capaces de aprovechar aquello que hemos aprendido gracias al versículo Jeremías, 20:9 de La Biblia?

El hecho de reflexionar acerca de el versículo Jeremías, 20:9 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa cuestión es conveniente acudir al versículo Jeremías, 20:9 todas y cada una de las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen para saber en qué forma acturar o para traer la paz a nuestros corazones y almas.