Levítico, 7:38
El Señor se las dio a Moisés en el monte Sinaí, cuando en el desierto de Sinaí ordenó a los israelitas que le presentaran ofrendas.
La cual intimó Jehová á Moisés, en el monte de Sinaí, el día que mandó á los hijos de Israel que ofreciesen sus ofrendas á Jehová en el desierto de Sinaí.
la cual mandó Jehová a Moisés en el monte de Sinaí, el día que mandó a los hijos de Israel que ofreciesen sus ofrendas a Jehová, en el desierto de Sinaí.
que Jehová dio a Moisés en el monte Sinaí, el día en que mandó a los hijos de Israel que presentaran sus ofrendas a Jehová en el desierto de Sinaí.
la cual mandó el SEÑOR a Moisés, en el monte de Sinaí, el día que mandó a los hijos de Israel que ofrecieran sus ofrendas al SEÑOR en el desierto de Sinaí.
La qual mandó Iehoua à Moyſen enel monte de Sinai, el dia que mando à los hijos de Iſrael que offrecieſſen ſus offrendas à Iehoua, enel defierto de Sinai.
El Señor se las dio a Moisés en el monte Sinaí, cuando en el desierto de Sinaí ordenó a los israelitas que le presentaran ofrendas.
El Señor se las dio a Moisés en el monte Sinaí, cuando en el desierto de Sinaí ordenó a los israelitas que le presentaran ofrendas.
esto es lo que el Señor mandó a Moisés en el monte Sinaí, el día que ordenó a los israelitas que presentaran sus ofrendas al Señor estando en el desierto de Sinaí.
que el SEÑOR ordenó a Moisés en el monte Sinaí, el día en que Él mandó a los hijos de Israel que presentaran sus ofrendas al SEÑOR en el desierto de Sinaí.
El SEÑOR le dio esas leyes a Moisés en el monte Sinaí cuando les ordenó a los israelitas que presentaran sus ofrendas al SEÑOR en el desierto de Sinaí.
esto es lo que el Señor mandó a Moisés en el monte Sinaí, el día que ordenó a los israelitas que presentaran sus ofrendas al Señor estando en el desierto del Sinaí.
Estas órdenes se las dio el SEÑOR a Moisés en el monte Sinaí, para que se las diera a conocer al pueblo de Israel, a fin de que ellos supieran cómo debían ofrecerse los sacrificios a Dios en el desier
El SEÑOR la ordenó a Moisés en el monte Sinaí, el día en que Él mandó a los israelitas que presentaran sus ofrendas al SEÑOR en el desierto de Sinaí.
El SEÑOR le dio esas instrucciones a Moisés en el monte Sinaí cuando les ordenó a los israelitas que presentaran sus ofrendas al SEÑOR en el desierto de Sinaí.
El SEÑOR se la dio a Moisés en el monte Sinaí el día en que mandó a los israelitas presentarle ofrendas en el desierto de Sinaí.
que YAVÉ ordenó a Moisés en la montaña Sinaí el día cuando mandó a los hijos de Israel que presentaran sus ofrendas ante YAVÉ en el desierto de Sinaí.
las cuales ordenó el SEÑOR a Moisés en el monte Sinaí cuando mandó a los hijos de Israel que presentaran sus ofrendas al SEÑOR en el desierto de Sinaí.
El Señor se la dio a Moisés en el monte Sinaí, el día que en el desierto de Sinaí les ordenó a los hijos de Israel que le presentaran sus ofrendas.
La cual intimó Jehová á Moisés, en el monte de Sinaí, el día que mandó á los hijos de Israel que ofreciesen sus ofrendas á Jehová en el desierto de Sinaí.
Estas fueron las instrucciones que Dios le dio a Moisés en el monte Sinaí, mientras los israelitas estaban en el desierto.
Estas fueron las instrucciones que Dios le dio a Moisés en el monte Sinaí, mientras los israelitas estaban en el desierto.
Deberíamos tener constantemente presente el versículo Levítico, 7:38 de La Sagrada Biblia con el fin de hacer una reflexión en torno a él.Tal vez sería adecuado preguntarse ¿Qué trataba de proponernos el Señor con el versículo Levítico, 7:38? ¿En qué coyunturas de nuestro día a día seremos capaces de poner en práctica aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo Levítico, 7:38 de La Biblia?
Discurrir y recapacitar en relación con el versículo Levítico, 7:38 es un gran aporte que nos permite a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es bueno apoyarse en el versículo Levítico, 7:38 en todas aquellas ocasiones en que nos pueda servir de guía para saber qué pasos dar o para traer paz a nuestro espíritu.
