Igualmente, el sacerdote que sacrifique al animal que alguien haya ofrecido en holocausto, podrá quedarse con la piel del animal.
Y el sacerdote que ofreciere holocausto de alguno, el cuero del holocausto que ofreciere, será para él.
Y el sacerdote que ofreciere holocausto de alguno, la piel del holocausto que ofreciere será para él.
El sacerdote que ofrezca el holocausto de alguien, se quedará con la piel del holocausto que ofreció.
Y el sacerdote que ofreciere holocausto de alguno, el cuero del holocausto que ofreciere, será del sacerdote.
Y el sacerdote que offreciere holocausto de alguno, el cuero del holocausto que offreciere, ſerá del sacerdote.
Igualmente, el sacerdote que sacrifique al animal que alguien haya ofrecido en holocausto, podrá quedarse con la piel del animal.
Igualmente, el sacerdote que sacrifique al animal que alguien haya ofrecido en holocausto, podrá quedarse con la piel del animal.
Al sacerdote que ofrezca el holocausto, le pertenece la piel de la víctima que se ofrece.
También el sacerdote que presente el holocausto de alguno, la piel del holocausto que haya presentado será para él.
La piel del animal que se ofrezca en un sacrificio que debe quemarse completamente también será para el sacerdote.
Al sacerdote que ofrezca el holocausto, le pertenece la piel de la víctima que se ofrece.
El sacerdote que ofrece un holocausto se quedará con la piel del animal.
También al sacerdote que presente el holocausto de alguien, la piel del holocausto que haya presentado será para él.
En el caso de la ofrenda quemada, el sacerdote podrá quedarse con la piel del animal sacrificado.
La piel de la víctima del holocausto también será para el sacerdote que la ofrezca.
El sacerdote que presente el holocausto de alguno, tendrá para él mismo la piel del holocausto que presentó.
“Si un sacerdote ofrece en holocausto la ofrenda de alguno, la piel del animal ofrecido será para el sacerdote.
La piel del animal ofrecido en holocausto será para el sacerdote que presente el holocausto.
Y el sacerdote que ofreciere holocausto de alguno, el cuero del holocausto que ofreciere, será para él.
»En cuanto a las ofrendas para hacer las paces conmigo y pedirme perdón, solo tengo una instrucción: Una parte del animal que se quema en mi honor, y su piel, será para el sacerdote que haga la ofrend
»En cuanto a las ofrendas para hacer las paces conmigo y pedirme perdón, solo tengo una instrucción: Una parte del animal que se quema en mi honor, y su piel, será para el sacerdote que haga la ofrend
Hay que tener siempre presente el versículo Levítico, 7:8 de La Santa Biblia de manera que podamos meditar acerca de él.Probablemente deberíamos preguntarnos ¿Qué trataba de proponernos Dios Padre con el versículo Levítico, 7:8? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que podemos aprovechar lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Levítico, 7:8 de La Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación sobre el versículo Levítico, 7:8 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores personas y a acercarnos más a Dios, esa es la cuestión por la cual es conveniente acudir al versículo Levítico, 7:8 cuando creamos que nos pueda servir de guía y así saber qué pasos dar o para traer paz a nuestras almas.