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San Lucas, 22:53

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San Lucas, 22:53

Todos los días he estado con ustedes en el templo, y no trataron de arrestarme. Pero esta es la hora de ustedes, la hora del poder de las tinieblas.


Habiendo estado con vosotros cada día en el templo, no extendisteis las manos contra mí; mas ésta es vuestra hora, y la potestad de las tinieblas.


Habiendo estado con vosotros cada día en el templo, no extendisteis las manos contra mí; mas esta es vuestra hora, y la potestad de las tinieblas.


Habiendo estado con vosotros cada día en el Templo, no extendisteis las manos contra mí; pero esta es vuestra hora y la potestad de las tinieblas.


Habiendo estado con vosotros cada día en el Templo, no extendisteis las manos contra mí; mas ésta es vuestra hora, y la potestad de las tinieblas.


Auiendo estado con vosotros cada dia enel Templo, no estendistes las manos en mi: mas eſta es vuestra hora, y la potestad de las tinieblas.


Todos los días he estado con ustedes en el templo, y no trataron de arrestarme. Pero ésta es la hora de ustedes, la hora del poder de las tinieblas.


Todos los días he estado con ustedes en el templo, y no trataron de arrestarme. Pero esta es la hora de ustedes, la hora del poder de las tinieblas.


Todos los días he estado entre ustedes en el Templo, y no me detuvieron. ¡Pero esta es la hora de ustedes, la hora del poder de las tinieblas!


Cuando estaba con vosotros cada día en el templo, no me echasteis mano; pero esta hora y el poder de las tinieblas son vuestros.


Yo he estado con ustedes todos los días en el área del templo y no me arrestaron. Pero esta es su hora, la hora en que reina la oscuridad.


Todos los días he estado entre ustedes en el Templo, y no me detuvieron. ¡Pero esta es la hora de ustedes, la hora del poder de las tinieblas!


Yo estaba con ustedes en el templo todos los días, y sin embargo, no se atrevieron a arrestarme. Pero esta es ya la hora de ustedes, hora en que reinan las tinieblas.


Cuando estaba con ustedes cada día en el templo, no me echaron mano; pero esta hora y el poder de las tinieblas son de ustedes».


¿Por qué no me arrestaron en el templo? Estuve allí todos los días, pero este es el momento de ustedes, el tiempo en que reina el poder de la oscuridad».


Todos los días estaba con ustedes en el Templo y no se atrevieron a ponerme las manos encima. Pero ya ha llegado la hora de ustedes, cuando reinan las...


Cada día Yo estaba con ustedes en el Templo, y no extendieron las manos contra Mí. Pero ésta es la hora de ustedes y la potestad de la oscuridad.


Habiendo estado con ustedes cada día en el templo, no extendieron la mano contra mí. Pero esta es la hora de ustedes y la del poder de las tinieblas.


Todos los días he estado con ustedes en el templo, y no me pusieron las manos encima. Pero esta es la hora de ustedes, la hora del poder de las tinieblas.»


Habiendo estado con vosotros cada día en el templo, no extendisteis las manos contra mí; mas ésta es vuestra hora, y la potestad de las tinieblas.


Todos los días estuve enseñando en el templo delante de ustedes, y nunca me arrestaron. Pero, bueno, el diablo los controla a ustedes, y él les mandó que lo hicieran ahora, porque es en la oscuridad c


Todos los días estuve enseñando en el templo delante de ustedes, y nunca me arrestaron. Pero, bueno, el diablo los controla a ustedes, y él les mandó que lo hicieran ahora, porque es en la oscuridad c


El versiculo San Lucas, 22:53 de La Santa Biblia consiste en algo que nos conviene tomar siempre en cuenta a fin de hacer una reflexión sobre él.Quizás deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué pretendía manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo San Lucas, 22:53? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestro día a día en que podemos recurrir a aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo San Lucas, 22:53 de Las Sagradas Escrituras?

Hacer un análisis profundo en relación con el versículo San Lucas, 22:53 nos es de gran ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, esa es la cuestión por la cual es aconsejable recurrir al versículo San Lucas, 22:53 siempre que necesitemos una luz que nos guíe y así saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestros corazones.