Poco después, otro lo vio y dijo: —Tú también eres de ellos. Pedro contestó: —No, hombre, no lo soy.
Y un poco después, viéndole otro, dijo: Y tú de ellos eras. Y Pedro dijo: Hombre, no soy.
Un poco después, viéndole otro, dijo: Tú también eres de ellos. Y Pedro dijo: Hombre, no lo soy.
Un poco después, viéndolo otro, dijo: —Tú también eres de ellos. Y Pedro dijo: —Hombre, no lo soy.
Y un poco después, viéndole otro, dijo: Y tú de ellos eras. Y Pedro dijo: Hombre, no soy.
Y vn poco deſpues viendolo otro, dixo, Y tu de ellos eras. y Pedro dixo, Hombre, no ſoy.
Poco después, otro lo vio y dijo: —Tú también eres de ellos. Pedro contestó: —No, hombre, no lo soy.
Poco después, otro lo vio y dijo: —Tú también eres de ellos. Pedro contestó: —No, hombre, no lo soy.
Poco después lo vio otro, que dijo: — También tú eres uno de ellos. Pedro replicó: — No lo soy, amigo.
Un poco después, otro al verlo, dijo: ¡Tú también eres uno de ellos! Pero Pedro dijo: ¡Hombre, no es cierto!
Un poco más tarde alguien vio a Pedro y dijo: —Tú también eres de ellos. Pero Pedro dijo: —¡No, hombre, no lo soy!
Poco después lo vio otro, que dijo: —También tú eres uno de ellos. Pedro replicó: —No lo soy, amigo.
Poco después alguien lo vio también y dijo: ―Tú también eres uno de ellos. Pedro contestó: ―¡No, hombre, no lo soy!
Un poco después, otro al verlo, dijo: «¡Tú también eres uno de ellos!». «¡Hombre, no es cierto!», le dijo Pedro.
Después de un rato, alguien más lo vio y dijo: —Seguramente tú eres uno de ellos. —¡No, hombre, no lo soy! —contestó.
Poco después lo vio otro y afirmó: —Tú también eres uno de ellos. —¡No, hombre, no lo soy! —contestó Pedro.
Un poco después, otro de ellos lo miró y dijo: Tú también eres de ellos. Pedro contestó: ¡Hombre, no soy!
Un poco después, al verlo otro, le dijo: —¡Tú también eres de ellos! Y Pedro dijo: —Hombre, no lo soy.
Un poco después, otro lo vio y le dijo: «Tú también eres de ellos.» Pero Pedro le dijo: «¡Hombre, no lo soy!»
Y un poco después, viéndole otro, dijo: Y tú de ellos eras. Y Pedro dijo: Hombre, no soy.
Al poco rato, un hombre lo vio y dijo: —¡Tú también eres uno de los seguidores de Jesús! Pedro contestó: —¡No, hombre! ¡No lo soy!
Al poco rato, un hombre lo vio y dijo: —¡Tú también eres uno de los seguidores de Jesús! Pedro contestó: —¡No, hombre! ¡No lo soy!
El versiculo San Lucas, 22:58 de La Santa Biblia consiste en algo que es preciso tener en todo momento presente con el fin de hacer una reflexión acerca de él.Quizás deberíamos preguntarnos ¿Qué intentaba decirnos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo San Lucas, 22:58? ¿En qué ocasiones de nuestra vida diaria podemos hacer valer lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo San Lucas, 22:58 de La Biblia?
Meditar acerca de el versículo San Lucas, 22:58 es un gran aporte que nos permite a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, ese es el motivo por el cual es oportuno servirse del versículo San Lucas, 22:58 en todas aquellas ocasiones en que nos pueda servir de guía y así saber cómo actuar o para traer paz a nuestro espíritu.