Porque no tengo a ningún otro que comparta tanto mis propios sentimientos y que de veras se preocupe por el bien de ustedes
Porque á ninguno tengo tan unánime, y que con sincera afición esté solícito por vosotros.
pues a ninguno tengo del mismo ánimo, y que tan sinceramente se interese por vosotros.
porque no tengo a ningún otro que comparta mis sentimientos y que tan sinceramente se interese por vosotros
Porque a ninguno tengo tan unánime, y que con sincera afición esté solícito por vosotros.
Porque à ninguno tengo tan vnanime, y que con sincera afficiõ esté solicito por vosotros.
Porque no tengo a ningún otro que comparta tanto mis propios sentimientos y que de veras se preocupe por el bien de ustedes
Porque no tengo a ningún otro que comparta tanto mis propios sentimientos y que de veras se preocupe por el bien de ustedes
Nadie como él comparte mis sentimientos ni se ocupa tan sinceramente de los asuntos de ustedes.
Pues a nadie más tengo del mismo sentir mío y que esté sinceramente interesado en vuestro bienestar.
No hay otro como Timoteo, él realmente se preocupa por ustedes y por su bienestar.
Nadie como él comparte mis sentimientos ni se ocupa tan sinceramente de los asuntos de ustedes.
No tengo a nadie que se preocupe como Timoteo por el bienestar de ustedes
Pues a nadie más tengo del mismo sentir y que esté sinceramente interesado en el bienestar de ustedes.
No cuento con nadie como Timoteo, quien se preocupa genuinamente por el bienestar de ustedes.
Nadie como él se preocupa de veras por el bienestar de ustedes
Porque a nadie tengo del mismo ánimo, quien genuinamente se preocupa por ustedes
pues no tengo a nadie que se interese por ustedes con tanto ánimo y sinceridad.
pues no tengo a nadie con ese mismo ánimo, y que con tanta sinceridad se interese por ustedes.
Porque á ninguno tengo tan unánime, y que con sincera afición esté solícito por vosotros.
Timoteo es el único que se preocupa por ustedes, y que los quiere tanto como yo.
Timoteo es el único que se preocupa por ustedes, y que los quiere tanto como yo.
Nos conviene tener siempre presente el versículo Filipenses, 2:20 de La Sagrada Biblia de manera que podamos reflexionar sobre él.Quizás sería bueno preguntarse ¿Qué trataba de decirnos el Señor con el versículo Filipenses, 2:20? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida diaria en que podemos poner en práctica lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Filipenses, 2:20 de la Santa Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación sobre el versículo Filipenses, 2:20 nos es de gran ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa razón es oportuno acudir al versículo Filipenses, 2:20 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos una luz que nos guíe de modo que podamos saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestro espíritu.