Hay tres cosas, y hasta cuatro, que me asombran y no alcanzo a comprender
Tres cosas me son ocultas; Aun tampoco sé la cuarta
Tres cosas me son ocultas; Aun tampoco sé la cuarta
Tres cosas me son ocultas, y una cuarta tampoco conozco
¶ Tres cosas me son ocultas; aun tampoco sé la cuarta
Tres coſas me ſon ocultas, y la quarta no sé
Hay tres cosas, y hasta cuatro, que me asombran y no alcanzo a comprender
Hay tres cosas, y hasta cuatro, que me asombran y no alcanzo a comprender
Hay tres cosas que me desbordan y una cuarta que no comprendo
Hay tres cosas que son incomprensibles para mí, y una cuarta que no entiendo
»Hay tres cosas que me dejan sorprendido, aunque en realidad son cuatro las que no entiendo
Hay tres cosas que me desbordan y una cuarta que no comprendo
Hay tres cosas, y hasta cuatro, que me asombran y no entiendo
Hay tres cosas que son incomprensibles para mí, Y una cuarta que no entiendo
Hay tres cosas que me asombran; no, son cuatro las que no comprendo
»Tres cosas hay que me causan asombro y una cuarta que no alcanzo a comprender
Tres cosas me son ocultas, Y tampoco comprendo la cuarta
Tres cosas me son misteriosas, y tampoco comprendo la cuarta
Hay tres cosas que me son incomprensibles, y aun la cuarta no la alcanzo a comprender
Tres cosas me son ocultas; Aun tampoco sé la cuarta
»Hay tres, y hasta cuatro cosas que me parecen increíbles y que no alcanzo a comprender
»Hay tres, y hasta cuatro cosas que me parecen increíbles y que no alcanzo a comprender
El versiculo Proverbios, 30:18 de La Sagrada Biblia consiste en algo que es preciso tener en todo momento presente para reflexionar acerca de él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué intentaba proponernos Dios Padre con el versículo Proverbios, 30:18? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestro día a día en que podemos poner en práctica aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo Proverbios, 30:18 de La Sagrada Biblia?
El hecho de reflexionar en relación con el versículo Proverbios, 30:18 nos ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, por esa cuestión es bueno servirse del versículo Proverbios, 30:18 todas las veces que pueda servirnos de guía y así saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.