33
Restauración del pueblo
1De nuevo recibió Jeremías la palabra del Señor, mientras seguía detenido en el patio de la guardia:#32,2.8.12; 37,21; 38,6.13; 39,14-15.
2— Así dice el Señor, el Creador, el que da forma y consolida todo#33,2: da forma y consolida todo: Referencia al poder del Creador, que nos pone en contacto con 32,17ss., el que tiene como nombre “el Señor”:#10,16; Gn 1,1; Is 48,2+; Am 9,6; Sal 104,5. 3Llámame y te responderé; te comunicaré cosas importantes y recónditas, que no conoces.#29,12; Sal 50,15. 4Pues así dice el Señor, Dios de Israel, sobre las casas de esta ciudad y los palacios de los reyes de Judá, destruidos ahora mediante las rampas de asalto y la espada: 5Los caldeos vienen a luchar contra la ciudad, y las casas se llenarán de los cadáveres de las personas que he decidido aniquilar lleno de ira y de cólera, pues oculté mi rostro a esta ciudad a causa de todas sus maldades. 6Pero luego yo mismo les proporcionaré cura y remedio, los sanaré y les revelaré el bienestar y la estabilidad que les voy a conceder.#3,22; 14,13; 30,17. 7Haré cambiar la suerte#33,7.11: cambiar la suerte: Ver nota a Jr 30,18. de Judá y la suerte de Israel, y los reconstruiré como al principio.#29,14+. 8Los purificaré de todos los pecados que cometieron contra mí y perdonaré todos los pecados y rebeldías que cometieron contra mí.#31,34; Ez 36,25. 9Y la ciudad será objeto de alegría, de alabanza y de honor para todas las naciones que escuchen los beneficios que le voy a conceder; y se estremecerán y se conmoverán a la vista de los beneficios y el bienestar que le voy a proporcionar.#32,41. 10Así dice el Señor: En este lugar del que dicen que está en ruinas, sin gente y sin animales, en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, desoladas, sin gente, sin habitantes y sin animales, podrán oírse de nuevo 11voces alegres de fiesta, las canciones del novio y de la novia, las voces de los que entran en el Templo del Señor con acciones de gracias proclamando:
“Den gracias al Señor del universo,
porque el Señor es bueno,
porque es eterno su amor”.
Pues pienso cambiar la suerte del país dejándolo como al principio, dice el Señor.#7,34+; 29,14+; 1 Cr 16,34; Esd 3,11; Sal 106,1+; 1 Ma 4,24.
12Así dice el Señor del universo: En este lugar arruinado, sin gente y sin animales, y en todas sus ciudades todavía habrá dehesas donde los pastores hagan reposar a sus ganados.#50,19. 13Por las ciudades de la montaña, de la Sefela y del Négueb, en el territorio de Benjamín, en las pedanías de Jerusalén y en las ciudades de Judá, todavía pasarán las ovejas junto al que las cuenta, dice el Señor. 14Ya llegan días —oráculo del Señor— en que cumpliré lo que anuncié sobre Israel y Judá.#29,10. 15En aquellos días y en aquel tiempo le brotará a David#33,15: le brotará a David: Resulta sorprendente este recurso a la dinastía davídica en el libro de Jeremías, cuando el profeta no ha manifestado en ningún momento una pizca de interés en esa dirección (ver por el contrario 22,24-30). Cabe pensar en un añadido redaccional posterior de alguien que seguía añorando la monarquía. un vástago legítimo que impondrá en el país la justicia y el derecho.#23,5-6; Is 45,24. 16En aquellos días Judá quedará a salvo y Jerusalén podrá vivir confiada, y la llamarán “el Señor es nuestra justicia#33,16: nuestra justicia: Ver notas a 23,6 y Sal 112,5.9.”. 17Pues así dice el Señor: No le faltará a David quien se siente en el trono de Israel.#2 Sm 7,12-16; Sal 89,34-38. 18Tampoco le faltarán a la tribu de Leví sacerdotes que ofrezcan holocaustos#33,18: Tampoco le faltarán... sacerdotes… holocaustos: Algunas voces autorizadas en el destierro de Babilonia opinaban que la reconstrucción del Templo constituía la principal tarea del Israel restaurado (ver Is 44,28; Ez 40,5—44,4). A tal efecto se planteaba también la continuidad de un cuerpo sacerdotal levítico., que me quemen ofrendas y que me hagan sacrificios a diario.
19Jeremías recibió la palabra del Señor en estos términos:
20— Así dice el Señor: Si son capaces de romper mi pacto con el día y con la noche, de modo que no haya día ni noche cuando corresponde,#31,35-36. 21también podrá romperse mi alianza con mi siervo David, de modo que ya no tenga quien le suceda en el trono, y con mis servidores los sacerdotes de la tribu de Leví. 22Así como no es posible contar los astros del cielo o calcular la arena del mar#33,22: calcular la arena del mar: En este versículo se percibe una alusión directa a las promesas patriarcales (ver Gn 15,5; también Dt 1,10)., así de incontable e incalculable haré a la descendencia de mi siervo David y a los levitas, mis servidores.#Gn 15,5; 22,17.
23Jeremías recibió la palabra del Señor en estos términos:
24— ¿No has visto lo que anda diciendo esta gente: que el Señor ha rechazado a las dos familias#33,24: las dos familias: Se trata de la familia davídica y de la familia sacerdotal, fundamentos institucionales, según algunos sectores ideológicos, del nuevo Israel. que había elegido? Pues hablando así desprecian a mi pueblo y no lo tienen por nación. 25Así dice el Señor: Tan cierto como que he pactado una alianza con el día y con la noche, y he establecido las leyes del cielo y de la tierra,#29,14+; 33,20-21+. 26lo es que no voy a impedir que surjan de la estirpe de Jacob y de mi siervo David personas que gobiernen a la estirpe de Abrahán, de Isaac y de Jacob, pues voy a cambiar su suerte#33,26: cambiar su suerte: Ver nota a 30,18. y me compadeceré de ellos.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' encontramos que el capítulo 33 del Jeremías se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro Jeremías de la Biblia tiene 52 capítulos. Y en el capítulo 33 podemos encontrar 26 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 33 del libro Jeremías de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 33 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 33 de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Santa Biblia.