Cuando el profeta de Judá acabó de comer y beber, el profeta anciano le aparejó el asno
Y como hubo comido del pan y bebido, el profeta que le había hecho volver le enalbardó un asno
Cuando había comido pan y bebido, el que le había hecho volver le ensilló el asno.
Después de haber comido pan y bebido, el que le había hecho volver le ensilló el asno.
Y cuando había comido del pan, y bebido, el profeta que le había hecho volver le ensilló un asno
Y como vuo comido del pan, y beuido, el propheta que lo auia hecho boluer le enalbardó vn asno
Cuando el profeta de Judá acabó de comer y beber, el profeta anciano le aparejó el asno
Cuando el profeta de Judá acabó de comer y beber, el profeta anciano le aparejó el asno
Cuando terminó de comer y beber, aparejó el burro del profeta al que había hecho volver.
Y sucedió que después de haber comido pan y de haber bebido agua, aparejó el asno para él, para el profeta que había hecho volver.
El hombre de Dios terminó de comer y beber. Entonces el viejo profeta le ensilló un asno y el hombre de Dios se fue.
Cuando terminó de comer y beber, aparejó el burro del profeta al que había hecho volver.
Y luego de acabar la comida, el anciano ensilló el burro del profeta.
Y después de haber comido pan y de haber bebido agua, aparejó el asno para él, para el profeta que había hecho volver.
Cuando el hombre de Dios terminó de comer y beber, el profeta anciano ensilló su propio burro y se lo dio
Cuando el hombre de Dios terminó de comer y beber, el profeta que lo había hecho volver le aparejó un asno
Y sucedió que comió pan y bebió. El profeta que lo hizo devolver le aparejó el asno.
Sucedió que cuando había comido pan y bebido agua, el profeta que lo había hecho volver le aparejó el asno.
En cuanto el varón de Dios terminó de comer y beber, el viejo profeta que lo había engañado le aparejó el asno.
Y como hubo comido del pan y bebido, el profeta que le había hecho volver le enalbardó un asno
El profeta de Judá terminó de comer y de beber, y el anciano profeta le preparó el burro.
El profeta de Judá terminó de comer y de beber, y el anciano profeta le preparó el burro.
Deberíamos tener siempre presente el versículo 1 Reyes, 13:23 de La Biblia para analizarlo y pensar en torno a él.Tal vez sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía proponernos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo 1 Reyes, 13:23? ¿En qué coyunturas de nuestra vida diaria tenemos la oportunidad de recurrir a lo que hemos aprendido gracias al versículo 1 Reyes, 13:23 de la Santa Biblia?
El hecho de reflexionar en torno a lo que se refiere el versículo 1 Reyes, 13:23 nos resulta fundamental para llegar a a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es conveniente recurrir al versículo 1 Reyes, 13:23 todas y cada una de las veces que necesitemos una luz que nos guíe y así saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestros corazones.