Él dijo: —Te ruego que le pidas al rey Salomón que me dé por esposa a Abisag la sunamita. Él no te lo negará.
El entonces dijo: Yo te ruego que hables al rey Salomón, (porque él no te hará volver tu rostro,) para que me dé á Abisag Sunamita por mujer.
Él entonces dijo: Yo te ruego que hables al rey Salomón (porque él no te lo negará), para que me dé a Abisag sunamita por mujer.
Él entonces dijo: —Te ruego que hables al rey Salomón (porque él no te lo negará), para que me dé Abisag, la sunamita, por mujer.
El entonces dijo: Yo te ruego que hables al rey Salomón (porque él no te hará volver tu rostro) para que me dé a Abisag, la sunamita por mujer.
El entonces dixo: Yo te ruego que hables àl Rey Salomõ, porque el no te hará boluer tu rostro, paraque me dé à Abisag Sunamita por muger.
Él dijo: —Te ruego que le pidas al rey Salomón que me dé por esposa a Abisag la sunamita. Él no te lo negará.
Él dijo: —Te ruego que le pidas al rey Salomón que me dé por esposa a Abisag la sunamita. Él no te lo negará.
Él le dijo: — Pídele al rey Salomón un favor, que él no te negará: que me dé por esposa a Abisag, la sunamita.
Él entonces dijo: Te ruego que hables al rey Salomón, pues él no te lo negará, para que me dé por mujer a Abisag sunamita.
Adonías le dijo: —Sé que el rey Salomón hará lo que le pidas. Dile que me permita casarme con Abisag la sunamita.
Él le dijo: —Pídele al rey Salomón un favor, que él no te negará: que me dé por esposa a Abisag, la sunamita.
Él respondió: ―Habla al rey Salomón en favor mío, porque yo sé que él hará cualquier cosa que le pidas, y dile que me dé por esposa a Abisag la sunamita.
Él entonces dijo: «Le ruego que hable al rey Salomón, pues él no se lo negará, para que me dé por mujer a Abisag la sunamita».
Él contestó: —Habla con el rey Salomón de mi parte, porque yo sé que él hará cualquier cosa que tú le pidas. Dile que me permita casarme con Abisag, la muchacha de Sunem.
—Por favor, pídale usted al rey Salomón que me dé como esposa a Abisag la sunamita; a usted no se lo negará.
Entonces él dijo: Te ruego que hables al rey Salomón, pues él no te lo negará, para que me dé como esposa a Abisag sunamita.
Entonces él dijo: —Por favor, habla al rey Salomón, porque él no te lo negará, para que me dé por mujer a Abisag la sunamita.
Y Adonías le dijo: «Por favor, habla con el rey Salomón y pídele que me dé por esposa a Abisag la sunamita. Yo sé que a ti no te negará lo que le pidas.»
El entonces dijo: Yo te ruego que hables al rey Salomón, (porque él no te hará volver tu rostro,) para que me dé á Abisag Sunamita por mujer.
Él le contestó: —Te ruego que le pidas al rey Salomón que me dé como esposa a Abisag, la joven de Sunem. Estoy seguro de que él no se opondrá.
Él le contestó: —Te ruego que le pidas al rey Salomón que me dé como esposa a Abisag, la joven de Sunem. Estoy seguro de que él no se opondrá.
El versiculo 1 Reyes, 2:17 de La Biblia es algo que es muy recomendable tener constantemente presente con el objetivo de analizarlo y pensar sobre él.Probablemente sería acertado cuestionarse ¿Qué trataba de decirnos Dios con el versículo 1 Reyes, 2:17? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que podemos recurrir a lo que aprendemos gracias al versículo 1 Reyes, 2:17 de la Santa Biblia?
Hacer un análisis profundo en torno a lo que se refiere el versículo 1 Reyes, 2:17 nos resulta fundamental para llegar a a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a acercarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es útil recurrir al versículo 1 Reyes, 2:17 en todas aquellas ocasiones en que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber en qué forma acturar o para traer la paz a nuestras almas.