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1 Reyes, 2:36

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1 Reyes, 2:36

Después mandó llamar a Simí, y le ordenó: —Constrúyete una casa en Jerusalén, para que vivas allí. Pero no salgas de allí a ninguna parte


Después envió el rey, é hizo venir á Semei, y díjole: Edifícate una casa en Jerusalem, y mora ahí, y no salgas de allá á una parte ni á otra


Después envió el rey e hizo venir a Simei, y le dijo: Edifícate una casa en Jerusalén y mora ahí, y no salgas de allí a una parte ni a otra


Después mandó a llamar el rey a Simei, y le dijo: —Edifícate una casa en Jerusalén y habita ahí, no salgas de allí a ninguna parte


¶Después envió el rey, e hizo venir a Simei, y le dijo: Edifícate una casa en Jerusalén, y mora ahí, y no salgas de allá a una parte ni a otra


¶ Y embió el Rey, y hizo venir à Semei, y dixole. Edificate vna caſa en Ieruſalẽ, y mora ay, y no salgas de allà à vna parte ni à otra.


Después mandó llamar a Simí, y le ordenó: —Constrúyete una casa en Jerusalén, para que vivas allí. Pero no salgas de allí a ninguna parte


Después mandó llamar a Simí, y le ordenó: —Constrúyete una casa en Jerusalén, para que vivas allí. Pero no salgas de allí a ninguna parte


Más tarde, el rey mandó llamar a Simeí y le dijo: — Hazte una casa en Jerusalén y quédate allí sin salir a ningún sitio.


Después el rey envió a llamar a Simei, y le dijo: Edifícate una casa en Jerusalén, vive ahí y no salgas de allí a ninguna parte.


Entonces el rey mandó buscar a Simí y le dijo: —Construye una casa aquí en Jerusalén, vive en ella y no salgas de la ciudad.


Más tarde, el rey mandó llamar a Simeí y le dijo: —Hazte una casa en Jerusalén y quédate allí sin salir a ningún sitio.


Después el rey mandó a buscar a Simí, y le dijo: ―Edifícate una casa en Jerusalén, y no salgas de la ciudad por ningún motivo. En el momento en que salgas y pases el arroyo de Cedrón, morirás, y toda


Después el rey envió a llamar a Simei, y le dijo: «Edifícate una casa en Jerusalén, vive ahí y no salgas de allí a ninguna parte.


Luego el rey mandó llamar a Simei y le dijo: —Construye una casa aquí en Jerusalén y vive en ella, pero no salgas de la ciudad por ningún motivo.


Luego mandó llamar a Simí y le dijo: —Constrúyete una casa en Jerusalén y quédate allí. No salgas a ninguna parte


Luego el rey llamó a Simei y le dijo: Edifícate una casa en Jerusalén y vive allí, y no salgas de allí a ninguna parte.


Después el rey envió a llamar a Simei y le dijo: —Edifica para ti una casa en Jerusalén y habita allí. No salgas de allí a ninguna parte


Después, el rey mandó llamar a Simey, y le dijo: «Construye una casa en Jerusalén, para que vivas allí; pero no se te ocurra salir.


Después envió el rey, é hizo venir á Semei, y díjole: Edifícate una casa en Jerusalem, y mora ahí, y no salgas de allá á una parte ni á otra


Luego Salomón mandó llamar a Simí y le dijo: —Construye una casa para ti en Jerusalén, y vive allí. No salgas a ningún lado.


Luego Salomón mandó llamar a Simí y le dijo: —Construye una casa para ti en Jerusalén, y vive allí. No salgas a ningún lado.


El versiculo 1 Reyes, 2:36 de La Biblia es algo que es conveniente tener constantemente presente a fin de analizarlo y pensar acerca de él. Acaso deberíamos preguntarnos ¿Qué quiso manifestarnos el Señor con el versículo 1 Reyes, 2:36? ¿En qué coyunturas de nuestra vida cotidiana seremos capaces de aprovechar lo que aprendemos gracias al versículo 1 Reyes, 2:36 de La Biblia?

Reflexionar sobre el versículo 1 Reyes, 2:36 nos supone una ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa razón es útil servirse del versículo 1 Reyes, 2:36 en todas aquellas ocasiones en que pueda servirnos de guía y así saber cómo proceder o para traer la paz a nuestras almas.