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Eclesiastés, 8:11

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Eclesiastés, 8:11

porque al no ejecutarse en seguida la sentencia para castigar la maldad, se provoca que el hombre sólo piense en hacer lo malo.


Porque no se ejecuta luego sentencia sobre la mala obra, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos lleno para hacer mal.


Por cuanto no se ejecuta luego sentencia sobre la mala obra, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos dispuesto para hacer el mal.


Si no se ejecuta enseguida la sentencia para castigar una mala obra, el corazón de los hijos de los hombres se dispone a hacer lo malo.


Porque no se ejecuta en seguida la sentencia sobre la mala obra, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos lleno para hacer mal.


Porque luego no ſe executa sentencia ſobre la mala obra, el coraçon de los hijos de los hombres eſtá lleno en ellos para hazer mal.


porque al no ejecutarse en seguida la sentencia para castigar la maldad, se provoca que el hombre sólo piense en hacer lo malo.


porque al no ejecutarse en seguida la sentencia para castigar la maldad, se provoca que el hombre sólo piense en hacer lo malo.


que no se ejecute inmediatamente la sentencia contra las malas acciones, y en consecuencia los humanos están deseando hacer el mal


Como la sentencia contra una mala obra no se ejecuta enseguida, por eso el corazón de los hijos de los hombres está en ellos entregado enteramente a hacer el mal.


Algunos reciben su castigo inmediatamente después de que cometen algo malo, pero si se demora el castigo otros se animan a hacer lo malo.


que no se ejecute inmediatamente la sentencia contra las malas acciones, y en consecuencia los humanos están deseando hacer el mal


Como Dios no castiga instantáneamente a los pecadores, la gente cree que puede hacer el mal impunemente.


Porque la sentencia contra una mala obra no se ejecuta enseguida, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos entregado enteramente a hacer el mal.


Cuando no se castiga enseguida un delito, la gente siente que no hay peligro en cometer maldades.


Cuando no se ejecuta rápidamente la sentencia de un delito, el corazón del pueblo se llena de razones para hacer lo malo.


Porque no se ejecuta sentencia inmediata contra una obra mala. El corazón de los hijos de hombres está dispuesto a hacer el mal.


Cuando la sentencia contra la mala obra no se ejecuta enseguida, el corazón de los hijos del hombre queda más predispuesto para hacer el mal.


Y es que cuando la sentencia para castigar una mala acción no se ejecuta de inmediato, el corazón de los mortales se dispone a seguir actuando mal.


Porque no se ejecuta luego sentencia sobre la mala obra, el corazón de los hijos de los hombres está en ellos lleno para hacer mal.


Cuando el malvado no es castigado de inmediato, la gente piensa que puede seguir haciendo lo malo.


Cuando el malvado no es castigado de inmediato, la gente piensa que puede seguir haciendo lo malo.


El versiculo Eclesiastés, 8:11 de La Sagrada Biblia es algo que es muy recomendable tomar continuamente en cuenta de manera que podamos reflexionar acerca de él.Seguramente sería adecuado preguntarse ¿Qué quiso manifestarnos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Eclesiastés, 8:11? ¿Cuáles son los momentos de nuestro día a día en que podemos aplicar aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo Eclesiastés, 8:11 de La Sagrada Biblia?

Dedicar tiempo a la meditación en relación con el versículo Eclesiastés, 8:11 nos resulta fundamental para llegar a a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, por ese motivo es aconsejable recurrir al versículo Eclesiastés, 8:11 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen de modo que podamos saber cómo actuar o para traer paz a nuestro espíritu.