Génesis, 11:32
Y Térah murió en Harán a la edad de doscientos cinco años.
Y fueron los días de Thare doscientos y cinco años; y murió Thare en Harán.
Y fueron los días de Taré doscientos cinco años; y murió Taré en Harán.
Y fueron los días de Taré doscientos cinco años, y murió Taré en Harán.
Y fueron los días de Taré doscientos cinco años; y murió Taré en Harán.
Y fueron los dias de Thare dozientos y cinco años, y murió Tharé en Haran.
Y Térah murió en Harán a la edad de doscientos cinco años.
Y Térah murió en Harán a la edad de doscientos cinco años.
Téraj vivió doscientos cinco años y murió en Jarán.
Los días de Taré fueron doscientos cinco años; y murió Taré en Harán.
Téraj vivió 205 años y murió en Jarán.
Téraj vivió doscientos cinco años y murió en Jarán.
Fue allí en Jarán donde murió Téraj, cuando tenía doscientos cinco años de edad.
Los días de Taré fueron 205 años. Y murió Taré en Harán.
Taré vivió doscientos cinco años y murió mientras aún estaba en Harán.
y allí mismo murió Téraj a los doscientos cinco años de edad.
Los días de Taré fueron 205 años, y murió en Harán.
Taré vivió doscientos cinco años, y murió Taré en Harán.
Y fueron los días de Téraj doscientos cinco años; y murió Téraj en Jarán.
Y fueron los días de Thare doscientos y cinco años; y murió Thare en Harán.
Allí murió Térah, a la edad de doscientos cinco años.
Allí murió Térah, a la edad de doscientos cinco años.
Es conveniente tener continuamente presente el versículo Génesis, 11:32 de La Sagrada Biblia con el propósito de reflexionar sobre él. ¿Qué quiso manifestarnos el Señor con el versículo Génesis, 11:32? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que aprendemos gracias al versículo Génesis, 11:32 de La Sagrada Biblia?
Reflexionar acerca de el versículo Génesis, 11:32 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, por esa razón es conveniente recurrir al versículo Génesis, 11:32 todas las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer paz a nuestras almas.
