Tratan por encima las heridas de mi pueblo; dicen que todo está bien, cuando todo está tan mal.
Y curaron el quebrantamiento de la hija de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.
Y curaron la herida de la hija de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.
Y curan la herida de la hija de mi pueblo con liviandad, diciendo: “Paz, paz”, ¡y no hay paz!
Y curaron el quebrantamiento de la hija de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.
Y curaron el quebrantamiẽto de la hija de mi pueblo con liuiandad, diziẽdo Paz, Paz: y no ay paz.
Tratan por encima las heridas de mi pueblo; dicen que todo está bien, cuando todo está tan mal.
Tratan por encima las heridas de mi pueblo; dicen que todo está bien, cuando todo está tan mal.
Han curado la herida de mi pueblo, pero sólo por encima, diciendo: “Paz, paz”, pero no hay paz.
Y curan a la ligera el quebranto de la hija de mi pueblo, diciendo: ‘Paz, paz’, pero no hay paz.
Porque curan las heridas de mi pueblo de manera superficial, y dicen: ‘Todo quedará en paz, tranquilos’, cuando en realidad todo está mal.
Han curado la herida de mi pueblo, pero solo por encima, diciendo: «Paz, paz», pero no hay paz.
Recetan medicina inútil para las dolorosas heridas de mi pueblo, pues le aseguran que todo va bien cuando es totalmente lo contrario.
Curan a la ligera el quebranto de la hija de Mi pueblo, Diciendo: “Paz, paz”, Pero no hay paz.
Ofrecen curas superficiales para la herida mortal de mi pueblo. Dan garantías de paz cuando no hay paz.
Curan por encima la herida de mi pueblo y les desean: ‘¡Paz, paz!’, cuando en realidad no hay paz.
Curan con liviandad el quebrantamiento de la hija de mi pueblo, pues dicen: ¡Paz! ¡Paz! Y no hay paz.
y curan con superficialidad el quebranto de la hija de mi pueblo, diciendo: ‘Paz, paz’. ¡Pero no hay paz!
Se les hace fácil sanar la herida de la hija de mi pueblo, con solo decir “¡Paz, paz!” ¡Pero no hay paz!
Y curaron el quebrantamiento de la hija de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.
Con pañitos de agua tibia pretenden curar las heridas del pueblo. Insisten en que todo está bien, cuando en realidad todo está mal.
Con pañitos de agua tibia pretenden curar las heridas del pueblo. Insisten en que todo está bien, cuando en realidad todo está mal.
El versiculo Jeremías, 8:11 de La Sagrada Biblia consiste en algo que es conveniente tomar continuamente en consideración de manera que podamos analizarlo y pensar acerca de él.Tal vez deberíamos preguntarnos ¿Qué trataba de proponernos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Jeremías, 8:11? ¿En qué ocasiones de nuestra vida cotidiana podemos poner en práctica aquello que hemos aprendido gracias al versículo Jeremías, 8:11 de la Santa Biblia?
El hecho de reflexionar sobre el versículo Jeremías, 8:11 es un gran aporte que nos permite a ser mejores personas y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa razón es aconsejable acudir al versículo Jeremías, 8:11 cuando creamos que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen y así saber qué pasos dar o para traer la paz a nuestras almas.