Pasó el verano, se acabó la cosecha y no ha habido salvación para nosotros.
Pasóse la siega, acabóse el verano, y nosotros no hemos sido salvos.
Pasó la siega, terminó el verano, y nosotros no hemos sido salvos.
¡Pasó la siega, se acabó el verano, pero nosotros no hemos sido salvos!
Se pasó la siega, se acabó el verano, y nosotros no hemos sido salvos.
Passóse la segada, acabóse el verano, y noſotros nohemos sido saluos.
Pasó el verano, se acabó la cosecha y no ha habido salvación para nosotros.
Pasó el verano, se acabó la cosecha y no ha habido salvación para nosotros.
Pasó la cosecha, se acabó el verano, pero nosotros no hemos sido salvados.
Pasó la siega, terminó el verano, y nosotros no hemos sido salvados.
Y el pueblo dice: «Pasó la época de la cosecha, se terminó el verano, y no hemos sido salvados».
Pasó la cosecha, se acabó el verano, pero nosotros no hemos sido salvados.
Pasó la cosecha, se fue el verano y nosotros seguimos esperando nuestra salvación.
«Pasó la siega, terminó el verano, Y nosotros no hemos sido salvados».
«Ya se acabó la cosecha, y el verano se ha ido —se lamenta el pueblo—, ¡y todavía no hemos sido salvados!».
«Pasó la cosecha, se acabó el verano y nosotros no hemos sido salvados».
Pasó la cosecha. Se acabó el verano y nosotros no fuimos salvados.
Ha pasado la siega, se ha acabado el verano, ¡y nosotros no hemos sido salvos!
Ya ha terminado la cosecha; ya pasó el verano. ¡Y nosotros no hemos sido salvados!
Pasóse la siega, acabóse el verano, y nosotros no hemos sido salvos.
El pueblo dijo: «Ya el verano terminó, y la cosecha llegó a su fin, pero nosotros seguimos sufriendo». Y yo respondí
El pueblo dijo: «Ya el verano terminó, y la cosecha llegó a su fin, pero nosotros seguimos sufriendo». Y yo respondí
Hay que tener siempre presente el versículo Jeremías, 8:20 de La Santa Biblia a fin de hacer una reflexión sobre él. ¿Qué quiso proponernos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Jeremías, 8:20? ¿En qué coyunturas de nuestra vida diaria tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que hemos aprendido gracias al versículo Jeremías, 8:20 de La Biblia?
El hecho de reflexionar en relación con el versículo Jeremías, 8:20 es un gran aporte que nos permite a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, esa es la razón por la cual es conveniente recurrir al versículo Jeremías, 8:20 siempre que pueda servirnos de guía para saber qué pasos dar o para traer la paz a nuestras almas.