Por la mañana, cuando volvía a la ciudad, Jesús sintió hambre.
Y por la mañana volviendo á la ciudad, tuvo hambre.
Por la mañana, volviendo a la ciudad, tuvo hambre.
Por la mañana, volviendo a la ciudad, tuvo hambre.
¶ Y por la mañana volviendo a la ciudad, tuvo hambre.
¶ Y por la mañana boluiendo à la Ciudad, tuuo hambre.
Por la mañana, cuando volvía a la ciudad, Jesús sintió hambre.
Por la mañana, cuando volvía a la ciudad, Jesús sintió hambre.
Por la mañana temprano, cuando Jesús volvía a la ciudad, sintió hambre.
Por la mañana, cuando regresaba a la ciudad, tuvo hambre.
Muy de mañana, Jesús estaba de regreso en Jerusalén y sintió hambre.
Por la mañana temprano, cuando Jesús volvía a la ciudad, sintió hambre.
Cuando regresaba a Jerusalén a la mañana siguiente, tuvo hambre.
Por la mañana, cuando regresaba a la ciudad, Jesús tuvo hambre.
Por la mañana, cuando Jesús regresaba a Jerusalén, tuvo hambre
Muy de mañana, cuando volvía a la ciudad, tuvo hambre.
Muy de mañana, mientras subía a la ciudad, tuvo hambre.
Volviendo a la ciudad por la mañana, tuvo hambre.
Cuando Jesús volvió a la ciudad por la mañana, tuvo hambre.
Y por la mañana volviendo á la ciudad, tuvo hambre.
Muy de mañana, Jesús fue otra vez a la ciudad de Jerusalén. En el camino tuvo hambre
Muy de mañana, Jesús fue otra vez a la ciudad de Jerusalén. En el camino tuvo hambre
Es conveniente tomar continuamente en consideración el versículo San Mateo, 21:18 de La Sagrada Biblia con la finalidad de reflexionar acerca de él.Tal vez deberíamos preguntarnos ¿Qué pretendía manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo San Mateo, 21:18? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida cotidiana en que podemos aprovechar aquello que hemos aprendido gracias al versículo San Mateo, 21:18 de Las Sagradas Escrituras?
Hacer un análisis profundo acerca de el versículo San Mateo, 21:18 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por eso es conveniente recurrir al versículo San Mateo, 21:18 todas y cada una de las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen y así saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestros corazones.