1 Corintios, 15:38
Después Dios le da la forma que él quiere, y a cada semilla le da el cuerpo que le corresponde.
Mas Dios le da el cuerpo como quiso, y á cada simiente su propio cuerpo.
pero Dios le da el cuerpo como él quiso, y a cada semilla su propio cuerpo.
Y Dios le da el cuerpo que él quiere, y a cada semilla su propio cuerpo.
mas Dios le da el cuerpo como quiso, y a cada simiente su propio cuerpo.
Mas Dios le dá el cuerpo como quiſo, y a cada ſimiente ſu proprio cuerpo.
Después Dios le da la forma que él quiere, y a cada semilla le da el cuerpo que le corresponde.
Después Dios le da la forma que él quiere, y a cada semilla le da el cuerpo que le corresponde.
Dios, por su parte, proporciona a esa semilla, y a todas y cada una de las semillas, la forma que le parece conveniente.
Pero Dios le da un cuerpo como Él quiso, y a cada semilla su propio cuerpo.
Dios le da a cada semilla la forma que él decide. Cada semilla recibe el cuerpo que le corresponde.
Dios, por su parte, proporciona a esa semilla, y a todas y cada una de las semillas, la forma que le parece conveniente.
pero Dios le da el cuerpo, del tipo que quiso que tuviera. La planta será de acuerdo con la semilla.
Pero Dios le da un cuerpo como Él quiso, y a cada semilla su propio cuerpo.
Luego Dios le da el cuerpo nuevo que él quiere que tenga. De cada clase de semilla crece una planta diferente.
Pero Dios le da el cuerpo que quiso darle y a cada clase de semilla le da un cuerpo propio.
Pero Dios le da el cuerpo que quiere, y cuerpo propio a cada semilla.
Pero Dios le da un cuerpo como quiere, a cada semilla su propio cuerpo.
pero Dios le da el cuerpo que quiso darle, y a cada semilla le da su propio cuerpo.
Mas Dios le da el cuerpo como quiso, y á cada simiente su propio cuerpo.
A cada semilla Dios le da el cuerpo que él quiere darle.
A cada semilla Dios le da el cuerpo que él quiere darle.
El versiculo 1 Corintios, 15:38 de La Biblia es algo que es aconsejable tomar siempre en consideración para hacer una reflexión acerca de él.Quizás sería adecuado preguntarse ¿Qué intentaba proponernos Dios Padre con el versículo 1 Corintios, 15:38? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana seremos capaces de hacer valer aquello que hemos aprendido gracias al versículo 1 Corintios, 15:38 de La Sagrada Biblia?
Hacer un análisis profundo sobre el versículo 1 Corintios, 15:38 nos resulta fundamental para llegar a a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a elevar nuestra alma hacia Dios, por ese motivo es conveniente recurrir al versículo 1 Corintios, 15:38 en todas aquellas ocasiones en que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber cómo actuar o para traer la paz a nuestros corazones y almas.
