El jefe le contestó: “Tú eres un empleado malo y perezoso, pues si sabías que yo cosecho donde no sembré y que recojo donde no esparcí
Y respondiendo su señor, le dijo: Malo y negligente siervo, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí
Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.
Respondiendo su señor, le dijo: “Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí.
Y respondiendo su señor, le dijo: Esclavo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí
Y respondiẽdo ſu señor dixole, Mal sieruo y negligente, sabias que siego dõde no sembré, y que coxgo donde no derramé.
El jefe le contestó: “Tú eres un empleado malo y perezoso, pues si sabías que yo cosecho donde no sembré y que recojo donde no esparcí
El jefe le contestó: “Tú eres un empleado malo y perezoso, pues si sabías que yo cosecho donde no sembré y que recojo donde no esparcí
El amo le contestó: “Administrador malo y holgazán: si sabías que yo cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido
Pero su señor respondió, y le dijo: «Siervo malo y perezoso, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.
El patrón le contestó: “¡Eres un siervo malo y perezoso! ¿Conque sabías que cosecho donde no he plantado y recojo donde no he sembrado?
El amo le contestó: «Administrador malo y holgazán: si sabías que yo cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido
“¡Malvado! ¡Haragán! Si sabías que quería obtener utilidades
Pero su señor le dijo: “Siervo malo y perezoso, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.
»Pero el amo le respondió: “¡Siervo perverso y perezoso! Si sabías que cosechaba lo que no sembré y recogía lo que no cultivé
Pero su señor le contestó: “¡Siervo malo y perezoso! ¿Así que sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido?
Pero su señor le respondió: Esclavo malo y negligente. ¿Sabías que cosecho donde no sembré y recojo donde no esparcí?
Su señor respondió y le dijo: “¡Siervo malo y perezoso! ¿Sabías que cosecho donde no sembré y recojo donde no esparcí?
Su señor le respondió: “Siervo malo y negligente, si sabías que yo siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí
Y respondiendo su señor, le dijo: Malo y negligente siervo, sabías que siego donde no sembré y que recojo donde no esparcí
»El hombre le respondió: “Eres un empleado malo y perezoso. Si sabías que soy muy exigente
»El hombre le respondió: “Eres un empleado malo y perezoso. Si sabías que soy muy exigente
El versiculo San Mateo, 25:26 de La Santa Biblia consiste en algo que nos conviene tener continuamente presente con el propósito de analizarlo y pensar en torno a él.Quizás sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía decirnos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo San Mateo, 25:26? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que tenemos la oportunidad de hacer valer aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo San Mateo, 25:26 de La Sagrada Biblia?
Hacer un análisis profundo en relación con el versículo San Mateo, 25:26 nos es de gran ayuda a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por esa cuestión es aconsejable acudir al versículo San Mateo, 25:26 todas y cada una de las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir de modo que podamos saber qué pasos dar o para traer paz a nuestros corazones y almas.