Una vez estaban ayunando los seguidores de Juan el Bautista y los fariseos, y algunas personas fueron a Jesús y le preguntaron: —Los seguidores de Juan y los de los fariseos ayunan: ¿por qué no ayunan
Y los discípulos de Juan, y de los Fariseos ayunaban; y vienen, y le dicen: ¿Por qué los discípulos de Juan y los de los Fariseos ayunan, y tus discípulos no ayunan?
Y los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunaban; y vinieron, y le dijeron: ¿Por qué los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunan, y tus discípulos no ayunan?
Los discípulos de Juan y los de los fariseos estaban ayunando. Entonces fueron y le preguntaron: —¿Por qué los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunan, y tus discípulos no ayunan?
¶ Y los discípulos de Juan, y de los fariseos ayunaban; y vienen, y le dicen: ¿Por qué los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunan, y tus discípulos no ayunan?
¶ Y los Diſcipulos de Ioan, y los de los Phariseos ayunauan, y vienen, y dizenle, Porque los discipulos de Ioã, y los de los Phariseos ayunan: y tus Diſcipulos no ayunã?
Una vez estaban ayunando los seguidores de Juan el Bautista y los fariseos, y algunas personas fueron a Jesús y le preguntaron: —Los seguidores de Juan y los de los fariseos ayunan: ¿por qué no ayunan
Una vez estaban ayunando los seguidores de Juan el Bautista y los fariseos, y algunas personas fueron a Jesús y le preguntaron: —Los seguidores de Juan y los de los fariseos ayunan: ¿por qué no ayunan
En cierta ocasión los discípulos de Juan el Bautista y los fariseos estaban guardando un ayuno, y algunos de ellos se acercaron a Jesús para preguntarle: — ¿Por qué los discípulos de Juan y los discíp
Los discípulos de Juan y los fariseos estaban ayunando; y vinieron* y le dijeron*: ¿Por qué ayunan los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos, pero tus discípulos no ayunan?
Al ver que los seguidores de Juan y los fariseos estaban ayunando, algunos se acercaron a Jesús y le preguntaron: —Los seguidores de Juan el Bautista y los de los fariseos ayunan, pero tus seguidores
En cierta ocasión los discípulos de Juan el Bautista y los fariseos estaban guardando un ayuno, y algunos de ellos se acercaron a Jesús para preguntarle: —¿Por qué los discípulos de Juan y los discípu
Al ver que los discípulos de Juan y los de los fariseos ayunaban, algunos se acercaron a Jesús y le preguntaron: ―¿Por qué tus discípulos no ayunan también?
Los discípulos de Juan y los fariseos estaban ayunando; y vinieron* y dijeron* a Jesús: «¿Por qué ayunan los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos, pero Tus discípulos no ayunan?».
Cierta vez que los discípulos de Juan y los fariseos ayunaban, algunas personas se acercaron a Jesús y le preguntaron: —¿Por qué tus discípulos no ayunan, como lo hacen los discípulos de Juan y los fa
Al ver que los discípulos de Juan y los fariseos ayunaban, algunos se acercaron a Jesús y le preguntaron: —¿Cómo es que los discípulos de Juan y de los fariseos ayunan, pero los tuyos no?
Los discípulos de Juan y los fariseos ayunaban. Se acercaron y le preguntaron: ¿Por qué los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos ayunan, y tus discípulos no ayunan?
Los discípulos de Juan y los fariseos estaban ayunando. Fueron a Jesús y le dijeron: —¿Por qué ayunan los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos pero tus discípulos no ayunan?
Los discípulos de Juan y los fariseos estaban ayunando, así que algunos fueron a preguntarle: «¿Por qué los discípulos de Juan y de los fariseos ayunan, y tus discípulos no?»
Y los discípulos de Juan, y de los Fariseos ayunaban; y vienen, y le dicen: ¿Por qué los discípulos de Juan y los de los Fariseos ayunan, y tus discípulos no ayunan?
Una vez, los discípulos de Juan el Bautista y los discípulos de los fariseos estaban ayunando. Algunas personas fueron a donde estaba Jesús y le preguntaron: —¿Por qué tus discípulos no ayunan? Los di
Una vez, los discípulos de Juan el Bautista y los discípulos de los fariseos estaban ayunando. Algunas personas fueron a donde estaba Jesús y le preguntaron: —¿Por qué tus discípulos no ayunan? Los di
Es preciso tener siempre presente el versículo San Marcos, 2:18 de los Textos Sagrados que componen la Biblia con la finalidad de hacer una reflexión sobre él. ¿Qué pretendía proponernos Dios Nuestro Señor con el versículo San Marcos, 2:18? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana podemos aprovechar lo que hemos llegado a saber gracias al versículo San Marcos, 2:18 de La Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación acerca de el versículo San Marcos, 2:18 nos es de gran ayuda a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, por esa cuestión es oportuno apoyarse en el versículo San Marcos, 2:18 todas las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer el sosiego a nuestros corazones y almas.