Salmos, 55:14
14 (15) con quien me reunía en el templo de Dios para conversar amigablemente, con quien caminaba entre la multitud!
Que juntos comunicábamos dulcemente los secretos, A la casa de Dios andábamos en compañía.
Que juntos comunicábamos dulcemente los secretos, Y andábamos en amistad en la casa de Dios.
que juntos comunicábamos dulcemente los secretos y andábamos en amistad en la casa de Dios.
Porque juntos comunicábamos dulcemente los secretos, en la Casa de Dios andábamos en compañía.
Mas tu hombre, ſegun mi estimacion, mi señor, y mi familiar.
¡Has sido tú, mi propio camarada, mi más íntimo amigo
14 (15) con quien me reunía en el templo de Dios para conversar amigablemente, con quien caminaba entre la multitud!
¡pero eres tú, alguien como yo, mi amigo íntimo, el que conozco!
nosotros que juntos teníamos dulce comunión, que con la multitud andábamos en la casa de Dios.
Nos unía una gran amistad y compartíamos en el templo de Dios; caminábamos juntos entre la multitud.
Juntos la intimidad compartimos y entre la multitud paseamos por la morada de Dios.
Como disfrutábamos nuestra amistad mientras juntos caminábamos a la casa de Dios.
Nosotros que juntos teníamos dulce comunión, Que con la multitud andábamos en la casa de Dios.
¡Cuánto compañerismo disfrutábamos cuando caminábamos juntos hacia la casa de Dios!
a quien me unía una bella amistad, con quien convivía en la casa de Dios.
Juntos teníamos dulce comunión, Y con intimidad andábamos en la Casa de ʼELOHIM.
quienes juntos compartíamos dulcemente los secretos, y con afecto nos paseábamos en la casa de Dios.
Tú y yo compartíamos dulces secretos, y juntos andábamos por la casa de Dios.
Que juntos comunicábamos dulcemente los secretos, A la casa de Dios andábamos en compañía.
12-14 (13-15) ¡Amigo mío, hasta tú me has ofendido! Tú, que eres igual que yo, tú, que eres como mi hermano, y que ibas conmigo al templo. Si otro me hubiera insultado, lo podría soportar; si otro me
12-14 (13-15) ¡Amigo mío, hasta tú me has ofendido! Tú, que eres igual que yo, tú, que eres como mi hermano, y que ibas conmigo al templo. Si otro me hubiera insultado, lo podría soportar; si otro me
El versiculo Salmos, 55:14 de los Textos Sagrados que componen la Biblia consiste en algo que deberíamos tomar en todo momento en consideración de manera que podamos hacer una reflexión acerca de él.Tal vez deberíamos preguntarnos ¿Qué trataba de decirnos Dios con el versículo Salmos, 55:14? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria seremos capaces de aprovechar aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Salmos, 55:14 de Las Sagradas Escrituras?
Discurrir y recapacitar en torno a lo que se refiere el versículo Salmos, 55:14 nos ayuda a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es útil servirse del versículo Salmos, 55:14 siempre que necesitemos una luz que nos guíe y así saber cómo actuar o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.
