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Moderación y buenos modales
1Si te sientas a comer#23,1-3: Si te sientas a comer…: Esta especie de breve manual de urbanidad en la mesa presenta notables afinidades con la obra antes citada: Sabiduría de Amenemope. con un notable,
mira bien a quién tienes delante
2Si eres voraz en demasía,
pon un cuchillo en tu garganta#23,2: pon un cuchillo en tu garganta: Es decir, controla tu apetito.
3y no codicies manjares exquisitos,
pues son comida engañosa#23,3: comida engañosa: Es decir, comida puesta como prueba-trampa para comprobar las reacciones y aptitudes del comensal..
4No te afanes buscando riqueza,
desecha ese pensamiento.
5Te vuelves para mirarla y ya no hay nada,
pues le salen alas de águila
y desaparece en las alturas#23,5: … desaparece en las alturas: Lit. vuela hasta el cielo. La Sabiduría de Amenemope recoge expresiones idénticas o equivalentes, sustituyendo el águila por el ganso..
6No compartas la comida del tacaño,
ni apetezcas sus exquisitos manjares
7que son como pelo en la garganta.
“¡Come y bebe!”, te dice,
pero no te es sincero.
8Vomitarás lo que has comido
y habrás malgastado tus amables palabras.
9No hables a oídos del necio,
pues desoirá tus sensatas razones.#Ver Mt 7,6.
10No desplaces viejas lindes,
ni invadas el campo del huérfano,
11porque su defensor#23,11: su defensor: Aparece por primera vez en Pr la referencia a Dios como “pariente próximo” y, en cuanto tal, vengador o redentor (en hebreo goel ) de huérfanos, viudas y desvalidos. es poderoso
y defenderá su causa contra ti.#22,28+; Ex 22,21-23.
12Aplica tu mente a la instrucción
y tu oído a la voz de la experiencia.
13No ahorres corrección al niño:
no morirá por azotarlo con la vara.#19,18 y nota.
14Azótalo, pues, con la vara
y salvarás su vida del abismo#23,14: abismo: Ver nota a 1,12..
Instrucciones paternas#23,15-28: La sección agrupa cuatro instrucciones breves introducidas por la expresión “hijo mío” (explícitamente en 28,15.19.26 e implícitamente en 28,22) y con una estructura parecida: exhortación a hacerse sabio y a evitar malas compañías (pecadores, borrachos, rameras), con particular insistencia en la alegría paterna (23,15.24.25) por la respuesta filial a los ideales sapienciales.
15Hijo mío, si llegas a ser sabio,
también yo me alegraré de corazón;
16todo mi ser celebrará
que tus labios hablen rectamente.
17No envidies a los pecadores
y respeta siempre al Señor,#Sal 37,1-4; 73,3.
18porque así tendrás futuro
y tu esperanza no se quebrará.#24,14.
19Escucha, hijo mío, hazte sabio
y sigue el camino recto.
20No te juntes con los que beben vino
ni con los que se atiborran de carne,
21pues borrachos y glotones se arruinan
y la modorra los viste de harapos.
22Escucha a tu padre que él te engendró,
y no desprecies a tu madre, aunque envejezca.
23Compra verdad y no la vendas;
y lo mismo sabiduría, instrucción e inteligencia.
24Rebosa de gozo el padre del justo,
quien tiene un hijo sabio se alegra.#10,1+.
25Que tu padre se alegre por ti
y goce la que te dio a luz.
26Hijo mío, confía en mí
y mira con buenos ojos mis indicaciones.
27Zanja profunda es la ramera
y pozo angosto la mujer ajena.#22,14.
28Está al acecho como un ladrón
y fomenta la discordia entre los hombres.
El borracho#23,29-35: La serie de preguntas iniciales (23,29) desemboca en la identificación del personaje, el bebedor (23,30), y en la prohibición a imitar su conducta (no mires el vino: 23,31). Se describe la atracción y los riesgos del vino (30,30-35) con brillantes imágenes y un marcado contraste entre tonos dramáticos y cómicos.
29¿Quién se lamenta? ¿Quién se queja?
¿Quién riñe? ¿Quién llora?
¿Quién golpea sin motivo?
¿Quién tiene ojos turbios?
30Los que se pasan con el vino
y no cesan de catar bebidas.
31No mires el vino cuando rojea:
¡Cómo brilla en la copa!
¡Qué suavemente entra#23,31: suavemente entra: Algunos manuscritos añaden: mojando labios y dientes.!
32Pero al final muerde como serpiente,
clava los dientes como víbora.
33Tus ojos alucinarán#23,33: alucinarán: Lit. verán cosas extrañas.,
tu mente te hará decir tonterías;
34te sentirás como alguien flotando en alta mar,
como quien se bambolea en la punta de un mástil;#Ver Sal 107, 26-27.
35y te dirás: “Me han pegado y no me duele;
me han golpeado y no lo siento;
en cuanto despierte pediré más vino”.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' encontramos que el capítulo 23 del Proverbios se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro Proverbios de la Biblia tiene 31 capítulos. Y en el capítulo 23 podemos encontrar 35 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 23 del libro Proverbios de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 23 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 23 de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Santa Biblia.