Hechos, 10:14
Pedro contestó: «No, Señor; yo nunca he comido nada profano ni impuro.»
Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa común é inmunda he comido jamás.
Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás.
Entonces Pedro dijo: —Señor, no; porque ninguna cosa común o impura he comido jamás.
Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa común e inmunda he comido jamás.
Entonces Pedro dixo, Señor no: porque ninguna coſa comun, y immunda, he comido jamás.
Pedro contestó: «No, Señor; yo nunca he comido nada profano ni impuro.»
Pedro contestó: «No, Señor; yo nunca he comido nada profano ni impuro.»
— De ninguna manera, Señor —respondió Pedro—. Jamás he comido nada profano o impuro.
Mas Pedro dijo: De ninguna manera, Señor, porque yo jamás he comido nada impuro o inmundo.
Pedro respondió: —¡Yo no haría eso, Señor! Nunca he comido nada prohibido o impuro.
—De ninguna manera, Señor —respondió Pedro—. Jamás he comido nada profano o impuro.
―¡Señor, no! —exclamó Pedro—. Jamás he comido animales impuros o inmundos.
Pero Pedro dijo: «De ninguna manera, Señor, porque yo jamás he comido nada impuro o inmundo».
—No, Señor —dijo Pedro—. Jamás he comido algo que nuestras leyes judías declaren impuro e inmundo.
—¡De ninguna manera, Señor! —respondió Pedro—. Jamás he comido nada impuro o inmundo.
Pedro respondió: De ningún modo, Señor, porque jamás comí alguna cosa impura o inmunda.
Entonces Pedro dijo: —¡De ninguna manera, Señor! Porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás.
Pedro respondió: «No, Señor, porque nunca he comido nada que sea común o impuro.»
Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa común é inmunda he comido jamás.
Pedro respondió: «¡No, Señor, de ninguna manera! Nuestra ley no nos permite comer carne de esos animales, y yo jamás he comido nada que esté prohibido.»
Pedro respondió: «¡No, Señor, de ninguna manera! Nuestra ley no nos permite comer carne de esos animales, y yo jamás he comido nada que esté prohibido.»
El versiculo Hechos, 10:14 de los Textos Sagrados que componen la Biblia consiste en algo que debemos tomar constantemente en consideración con el objetivo de analizarlo y pensar sobre él.Tal vez sería acertado cuestionarse ¿Qué trataba de proponernos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Hechos, 10:14? ¿En qué momentos de nuestro día a día podemos aprovechar lo que aprendemos gracias al versículo Hechos, 10:14 de Las Sagradas Escrituras?
Discurrir y recapacitar en torno a lo que se refiere el versículo Hechos, 10:14 nos supone una ayuda a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por esa razón es útil recurrir al versículo Hechos, 10:14 siempre que nos pueda servir de guía para saber qué pasos dar o para traer la paz a nuestras almas.
