pues los oían hablar en lenguas extrañas y alabar a Dios.
Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban á Dios.
Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios.
porque los oían que hablaban en lenguas y que glorificaban a Dios.
Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios.
Porque los oyan que hablauan en lenguas, y que magnificauan à Dios. Entõces Pedro respondió.
pues los oían hablar en lenguas extrañas y alabar a Dios.
pues los oían hablar en lenguas extrañas y alabar a Dios.
Los oían, en efecto, hablar en idiomas desconocidos y proclamar la grandeza de Dios. Pedro dijo entonces
pues les oían hablar en lenguas y exaltar a Dios. Entonces Pedro dijo
Los escuchaban hablar en lenguas y alabar a Dios. Entonces Pedro les dijo
Los oían, en efecto, hablar en idiomas desconocidos y proclamar la grandeza de Dios. Pedro dijo entonces
pues los oían hablando en lenguas y alabando a Dios. Entonces Pedro respondió
pues los oían hablar en lenguas y exaltar a Dios. Entonces Pedro dijo
Pues los oyeron hablar en otras lenguas y alabar a Dios. Entonces Pedro preguntó
pues los oían hablar en lenguas y alabar a Dios. Entonces Pedro respondió
pues los oían que hablaban lenguas y exaltaban a Dios. Entonces Pedro preguntó
pues les oían hablar en lenguas y glorificar a Dios.
pues los oían hablar en lenguas y magnificar a Dios.
Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban á Dios.
Y los oían hablar y alabar a Dios en idiomas desconocidos.
Y los oían hablar y alabar a Dios en idiomas desconocidos.
Nos conviene tomar constantemente en cuenta el versículo Hechos, 10:46 de La Biblia para analizarlo y pensar en torno a él.Tal vez deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de decirnos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Hechos, 10:46? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria tenemos la oportunidad de hacer valer lo que aprendemos gracias al versículo Hechos, 10:46 de La Sagrada Biblia?
Meditar acerca de el versículo Hechos, 10:46 nos supone una ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por eso es conveniente acudir al versículo Hechos, 10:46 siempre que nos pueda servir de guía para saber en qué forma acturar o para traer la serenidad a nuestras almas.