Pedro entonces comenzó a hablar, y dijo: —Ahora entiendo que de veras Dios no hace diferencia entre una persona y otra
Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: Por verdad hallo que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: —En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas
¶ Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: En verdad hallo que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro, abriendo ſu boca, dixo, Por verdad hallo, que Dios no haze accepcion de perſonas
Pedro entonces comenzó a hablar, y dijo: —Ahora entiendo que de veras Dios no hace diferencia entre una persona y otra
Pedro entonces comenzó a hablar, y dijo: —Ahora entiendo que de veras Dios no hace diferencia entre una persona y otra
Pedro tomó entonces la palabra y se expresó en estos términos: — Ahora comprendo verdaderamente que para Dios no existen favoritismos.
Entonces Pedro, abriendo la boca, dijo: C iertamente ahora entiendo que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro dijo: —Ahora entiendo que de verdad para Dios todos somos iguales.
Pedro tomó entonces la palabra y se expresó en estos términos: —Ahora comprendo verdaderamente que para Dios no existen favoritismos.
―¡Ya veo que para Dios no hay favoritismos!
Entonces Pedro tomó la palabra, y dijo: « C iertamente ahora entiendo que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro respondió: —Veo con claridad que Dios no muestra favoritismo.
Pedro tomó la palabra y dijo: —Ahora comprendo que en realidad para Dios no hay favoritismos
Pedro dijo: En verdad entiendo que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: —De veras, me doy cuenta de que Dios no hace distinción de personas
Entonces Pedro empezó a hablar, y dijo: «En verdad comprendo ahora que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: Por verdad hallo que Dios no hace acepción de personas
Entonces Pedro comenzó a decirles: —Ahora comprendo que para Dios todos somos iguales.
Entonces Pedro comenzó a decirles: —Ahora comprendo que para Dios todos somos iguales.
Es aconsejable tomar en todo momento en cuenta el versículo Hechos, 10:34 de La Biblia a fin de meditar acerca de él. ¿Qué trataba de proponernos Dios Padre con el versículo Hechos, 10:34? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria podemos aprovechar aquello que aprendemos gracias al versículo Hechos, 10:34 de la Santa Biblia?
Hacer un análisis profundo en relación con el versículo Hechos, 10:34 nos supone una ayuda a ser mejores personas y a acercarnos más a Dios, por eso es bueno servirse del versículo Hechos, 10:34 cada vez que nos pueda servir de guía y así saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestros corazones.