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Jeremías, 48:6

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Jeremías, 48:6

¡Huyan! ¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como la zarza en el desierto!


Huid, salvad vuestra vida, y sed como retama en el desierto.


Huid, salvad vuestra vida, y sed como retama en el desierto.


¡Huid, salvad vuestra vida, sed como la retama en el desierto!


Huid, salvad vuestra vida, y sed como retama en el desierto.


Huyd, eſcapad vuestra vida, y ſean como retama enel desierto.


¡Huyan! ¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como la zarza en el desierto!


¡Huyan! ¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como la zarza en el desierto!


Huyan, salven su vida, igual que asno salvaje en la estepa.


Huid, salvad vuestras vidas, sed como un enebro en el desierto.


¡Huyan! ¡Sálvese quien pueda! Sean como los arbustos del desierto.


Huyan, salven su vida, igual que asno salvaje en la estepa.


¡Sálvese quien pueda; ocúltense en el desierto!


Huyan, salven sus vidas, Sean como un arbusto en el desierto.


¡Huyan por su vida! ¡Escóndanse en el desierto!


¡Huyan! ¡Sálvese quien pueda! ¡Sean como las zarzas del desierto!


Huyan, salven su vidas. Sean como el asno montés en el desierto.


Huyan, salven sus vidas y sean como el asno montés en el desierto.


“¡Huyan, pónganse a salvo! ¡Sean como la retama del desierto!”


Huid, salvad vuestra vida, y sed como retama en el desierto.


¡Sálvese quien pueda! ¡Huyamos como burros salvajes!”


¡Sálvese quien pueda! ¡Huyamos como burros salvajes!”


Es preciso tomar siempre en cuenta el versículo Jeremías, 48:6 de La Sagrada Biblia con el objetivo de meditar en torno a él. ¿Qué quiso decirnos Dios con el versículo Jeremías, 48:6? ¿En qué ocasiones de nuestro día a día seremos capaces de poner en práctica aquello que aprendemos gracias al versículo Jeremías, 48:6 de la Santa Biblia?

Reflexionar en relación con el versículo Jeremías, 48:6 nos supone una ayuda a ser mejores personas y a acercarnos más a Dios, por eso es aconsejable apoyarse en el versículo Jeremías, 48:6 en todas aquellas ocasiones en que nos pueda servir de guía y así saber en qué forma acturar o para traer la tranquilidad a nuestro espíritu.