<

Salmos, 39:11

>

Salmos, 39:11

11 (12) Tú corriges al hombre castigando su maldad, y reduces a polvo lo que más ama. ¡Todo hombre es un suspiro!


Con castigos sobre el pecado corriges al hombre, Y haces consumirse como de polilla su grandeza: Ciertamente vanidad es todo hombre. (Selah.)


Con castigos por el pecado corriges al hombre, Y deshaces como polilla lo más estimado de él; Ciertamente vanidad es todo hombre. Selah


Con castigos por el pecado corriges al hombre y deshaces como polilla lo más estimado de él; ¡ciertamente, es apenas un soplo todo ser humano! Selah


Con castigos sobre la iniquidad corriges al hombre, y haces consumirse como de polilla su grandeza; ciertamente vanidad es todo hombre. (Selah.)


Quita dè ſobre mi tu plaga; de la guerra de tu mano ſoy consumido.


Aparta de mí tus golpes; estoy acabado por los golpes de tu brazo.


11 (12) Tú corriges al hombre castigando su maldad, y reduces a polvo lo que más ama. ¡Todo hombre es un suspiro!


Aparta de mí tus golpes, que por la ira de tu mano muero.


Con castigos corriges al hombre por su iniquidad; como la polilla, consumes lo que es más precioso para él; ciertamente, todo hombre es solo un soplo. (Selah)


Tú castigas a la gente por su maldad, consumiendo como polilla sus tesoros para enseñarle la forma en que debe vivir. Las cosas que la gente busca y atesora desaparecen fácilmente. Nuestra vida es com


Corriges a los seres humanos castigando sus culpas; como la polilla destruyes sus encantos, pues solo es vanidad el ser humano. [Pausa]


Cuando lo castigas por sus pecados, el ser humano queda destruido, pues es tan frágil como trapo roído de polilla; sí, la existencia humana es como un soplo.


Con castigos reprendes al hombre por su iniquidad; Como la polilla, consumes lo que es más precioso para él. Ciertamente, todo hombre es solo un soplo. (Selah)


Cuando nos disciplinas por nuestros pecados, consumes como una polilla lo que estimamos precioso. Cada uno de nosotros es apenas un suspiro. Interludio


Tú reprendes a los mortales, los castigas por su iniquidad; como polilla, acabas con lo que más desean. ¡Un soplo nada más es el mortal! Selah


Corriges al hombre con castigos por su iniquidad. Como polilla carcomes lo que es precioso para él. Ciertamente todo hombre es solo un soplo. Selah


Con castigos por el pecado corriges al hombre y deshaces como polilla su hermosura. Ciertamente vanidad es todo hombre. Selah


Tú nos corriges al castigar nuestros pecados, pero destruyes, como polilla, lo que más amamos. ¡Ay, solo un soplo somos los mortales!


Con castigos sobre el pecado corriges al hombre, Y haces consumirse como de polilla su grandeza: Ciertamente vanidad es todo hombre. (Selah.)


11 (12) Tú castigas a la gente y corriges su maldad; destruyes como polilla lo que ellos más valoran. ¡Nadie dura más que un suspiro!


11 (12) Tú castigas a la gente y corriges su maldad; destruyes como polilla lo que ellos más valoran. ¡Nadie dura más que un suspiro!


Es aconsejable tener en todo momento presente el versículo Salmos, 39:11 de La Sagrada Biblia con el fin de reflexionar en torno a él.Tal vez deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de proponernos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Salmos, 39:11? ¿En qué momentos de nuestro día a día podemos llevar a la práctica lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Salmos, 39:11 de Las Sagradas Escrituras?

El hecho de reflexionar en torno a lo que se refiere el versículo Salmos, 39:11 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a acercarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es bueno recurrir al versículo Salmos, 39:11 cada vez que nos pueda servir de guía y así saber cómo actuar o para traer paz a nuestro espíritu.