Ezequiel, 10:8
Debajo de las alas de los seres alados se veía algo así como una mano de hombre. Uno de ellos extendió la mano hacia el fuego que estaba en medio y, tomando un poco, se lo puso en las manos al hombre
Y apareció en los querubines la figura de una mano humana debajo de sus alas.
Y apareció en los querubines la figura de una mano de hombre debajo de sus alas.
Y apareció en los querubines la figura de una mano de hombre debajo de sus alas.
Y apareció en los querubines la figura de una mano humana debajo de sus alas.
Y appareció en los Cherubines la figura de vna mano humana debaxo de ſus alas
Debajo de las alas de los seres alados se veía algo así como una mano de hombre. Uno de ellos extendió la mano hacia el fuego que estaba en medio y, tomando un poco, se lo puso en las manos al hombre
Debajo de las alas de los seres alados se veía algo así como una mano de hombre. Uno de ellos extendió la mano hacia el fuego que estaba en medio y, tomando un poco, se lo puso en las manos al hombre
Entonces apareció una especie de mano humana debajo de las alas de los querubines.
Y los querubines parecían tener la forma de la mano de un hombre debajo de sus alas.
Debajo de las alas, los querubines tenían algo parecido a manos humanas.
Entonces apareció una especie de mano humana debajo de las alas de los querubines.
Entonces uno de los querubines extendió su mano (pues cada querubín tenía, debajo de sus alas, lo que se parecían a manos humanas) y tomó algunas brasas encendidas de las llamas de entre las ruedas y
Debajo de sus alas los querubines parecían tener la forma de la mano de un hombre.
(Todos los querubines tenían debajo de sus alas lo que parecían ser manos humanas).
(Debajo de las alas de los querubines se veía algo semejante a la mano de un hombre).
Apareció de entre los querubines por debajo de sus alas lo que tenía la semejanza de una mano humana.
Los querubines parecían tener debajo de sus alas algo semejante a una mano de hombre.
Por debajo de las alas de los querubines podía verse la figura de una mano humana.
Y apareció en los querubines la figura de una mano humana debajo de sus alas.
En ese momento Dios le ordenó al escritor: «Métete entre las ruedas que están debajo de los cuatro seres, toma un puñado de los carbones encendidos que hay allí, y espárcelos por toda la ciudad». Aque
En ese momento Dios le ordenó al escritor: «Métete entre las ruedas que están debajo de los cuatro seres, toma un puñado de los carbones encendidos que hay allí, y espárcelos por toda la ciudad». Aque
El versiculo Ezequiel, 10:8 de los Textos Sagrados que componen la Biblia consiste en algo que debemos tomar siempre en cuenta de tal forma que podamos meditar en torno a él. ¿Qué intentaba decirnos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Ezequiel, 10:8? ¿En qué ocasiones de nuestro día a día tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Ezequiel, 10:8 de La Biblia?
El hecho de reflexionar acerca de el versículo Ezequiel, 10:8 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a acercarnos más a Dios, por eso es útil apoyarse en el versículo Ezequiel, 10:8 cada vez que pueda servirnos de guía de modo que podamos saber cómo proceder o para traer paz a nuestros corazones.
