16 (18) Entonces me llamará “Marido mío”, en vez de llamarme “Baal mío”. Yo, el Señor, lo afirmo.
Y será que en aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás Marido mío, y nunca más me llamarás Baali.
En aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás Ishi, y nunca más me llamarás Baali.
En aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás Ishi, y nunca más me llamarás Baali.
Y será que en aquel tiempo, dice el SEÑOR, me llamarás marido mío, y nunca más me llamarás Baali.
Y sera, que en aquel tiempo, dize Iehoua, me llamarás Marido mio, y nunca mas me llamaras Baali.
»Yo la voy a enamorar: la llevaré al desierto y le hablaré al corazón.
16 (18) Entonces me llamará “Marido mío”, en vez de llamarme “Baal mío”. Yo, el Señor, lo afirmo.
Pero he aquí que voy a seducirla: la llevaré al desierto y le hablaré al corazón.
Sucederá en aquel día —declara el SEÑOR— que me llamarás Ishí y no me llamarás más Baalí.
»Esto dice el SEÑOR: En ese momento dejarás de llamarme “Señor” y me llamarás “esposo mío”.
Pero he aquí que voy a seducirla: la llevaré al desierto y le hablaré al corazón.
»En aquel día ella me llamará “mi esposo” en vez de “mi señor”. Lo digo yo, el SEÑOR.
Sucederá en aquel día», declara el SEÑOR, «Que me llamarás Ishí Y no me llamarás más Baalí.
Al llegar ese día —dice el SEÑOR—, me llamarás “esposo mío” en vez de “mi señor”.
»En aquel día», afirma el SEÑOR, «me llamarás “esposo mío” y no me llamarás más “mi señor”.
Sucederá en aquel día, dice YAVÉ, Que tú me llamarás: Esposo mío, Y ya no me llamarás: ʼADóN mío.
Sucederá en aquel día, dice el SEÑOR, que me llamarás: ‘Marido mío’ y nunca más me llamarás: ‘Señor mío’.
»Cuando llegue el momento, tú me llamarás Ishí, y nunca más volverás a llamarme Baalí. —Palabra del Señor.
Y será que en aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás Marido mío, y nunca más me llamarás Baali.
16-17 (18-19) Ya no volverá a serme infiel adorando a otros dioses, sino que me reconocerá como su único Dios. »Yo soy el Dios de Israel, y les juro que así será.
16-17 (18-19) Ya no volverá a serme infiel adorando a otros dioses, sino que me reconocerá como su único Dios. »Yo soy el Dios de Israel, y les juro que así será.
El versiculo Oseas, 2:16 de La Sagrada Biblia consiste en algo que deberíamos tomar continuamente en consideración con el propósito de meditar acerca de él.Quizás sería adecuado preguntarse ¿Qué intentaba proponernos el Señor con el versículo Oseas, 2:16? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida cotidiana en que tenemos la oportunidad de hacer valer lo que hemos aprendido gracias al versículo Oseas, 2:16 de la Santa Biblia?
Meditar sobre el versículo Oseas, 2:16 nos supone una ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a elevar nuestra alma hacia Dios, esa es la cuestión por la cual es aconsejable acudir al versículo Oseas, 2:16 todas las veces que nos pueda servir de guía y así saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestro espíritu.