Estos judíos mataron al Señor Jesús, como antes habían matado a los profetas, y nos echaron fuera a nosotros. No agradan a Dios, y están en contra de todos
Los cuales aun mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y á nosotros nos han perseguido; y no agradan á Dios, y se oponen á todos los hombres
los cuales mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos expulsaron; y no agradan a Dios, y se oponen a todos los hombres
Estos mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos expulsaron; no agradan a Dios y se oponen a todos los hombres
los cuales también mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos han perseguido; y no agradan a Dios, y se oponen a todos los hombres
Que tambien mataron àl Señor Iesus, y à ſus proprios Prophetas: yà noſotros nos han perseguido: y no ſon agradables à Dios, y à todos los hõbres ſon enemigos
Estos judíos mataron al Señor Jesús, como antes habían matado a los profetas, y nos echaron fuera a nosotros. No agradan a Dios, y están en contra de todos
Estos judíos mataron al Señor Jesús, como antes habían matado a los profetas, y nos echaron fuera a nosotros. No agradan a Dios, y están en contra de todos
que fueron los que mataron a Jesús, el Señor, y a los profetas. Los mismos que ahora nos persiguen a nosotros, desagradan a Dios y se hacen enemigos de todo ser humano
los cuales mataron tanto al Señor Jesús como a los profetas, y a nosotros nos expulsaron, y no agradan a Dios sino que son contrarios a todos los hombres
Ellos mataron al Señor Jesús y a los profetas, y a nosotros nos obligaron a abandonar el país. Ellos no agradan a Dios y están en contra de todos los seres humanos.
que fueron los que mataron a Jesús, el Señor, y a los profetas. Los mismos que ahora nos persiguen a nosotros, desagradan a Dios y se hacen enemigos de todo ser humano
Estos judíos mataron al Señor Jesús y a los profetas, y a nosotros nos echaron fuera. No hacen lo que a Dios le agrada y están en contra de todos
Estos mataron tanto al Señor Jesús como a los profetas, y a nosotros nos expulsaron, y no agradan a Dios sino que son contrarios a todos los hombres
Pues algunos de los judíos mataron a los profetas, y otros incluso mataron al Señor Jesús. Ahora también nos han perseguido a nosotros. Ellos no agradan a Dios y actúan en contra de toda la humanidad
Estos mataron al Señor Jesús y a los profetas, y a nosotros nos expulsaron. No agradan a Dios y son hostiles a todos
De igual manera, éstos, después de matar al Señor Jesús y a los profetas, de perseguirnos severamente y de no agradar a Dios, son hostiles a todos los hombres.
Estos mataron tanto al Señor Jesús como a los profetas, a nosotros nos han perseguido, no agradan a Dios y se oponen a todos los hombres
los cuales mataron al Señor Jesús y a sus propios profetas, y a nosotros nos expulsaron. Ellos no agradan a Dios, se oponen a todo el mundo
Los cuales aun mataron al Señor Jesús y á sus propios profetas, y á nosotros nos han perseguido; y no agradan á Dios, y se oponen á todos los hombres
Los judíos mataron al Señor Jesús y a los profetas, y luego nos echaron de su país. Ellos no hacen lo que a Dios le agrada, sino que están en contra de todos
Los judíos mataron al Señor Jesús y a los profetas, y luego nos echaron de su país. Ellos no hacen lo que a Dios le agrada, sino que están en contra de todos
El versiculo 1 Tesalonicenses, 2:15 de La Sagrada Biblia consiste en algo que es conveniente tener constantemente presente con el fin de meditar acerca de él.Tal vez deberíamos preguntarnos ¿Qué trataba de decirnos Dios Padre con el versículo 1 Tesalonicenses, 2:15? ¿En qué ocasiones de nuestra vida cotidiana seremos capaces de aplicar lo que hemos llegado a saber gracias al versículo 1 Tesalonicenses, 2:15 de Las Sagradas Escrituras?
Dedicar tiempo a la meditación sobre el versículo 1 Tesalonicenses, 2:15 nos es de gran ayuda a ser mejores personas y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por ese motivo es conveniente apoyarse en el versículo 1 Tesalonicenses, 2:15 en todas aquellas ocasiones en que pueda servirnos de guía y así saber en qué forma acturar o para traer la paz a nuestros corazones y almas.