Eclesiastés, 2:2
Y concluí que la risa es locura y que el placer de nada sirve.
A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto?
A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto?
A la risa dije: «Enloqueces»; y al placer: «¿De qué sirve esto?»
A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto?
A la risa dixe, En loqueces, y àl plazer: De que sirue eſto?
Y concluí que la risa es locura y que el placer de nada sirve.
Y concluí que la risa es locura y que el placer de nada sirve.
Dije a la risa: ¡desquiciada! Y a la alegría: ¿para qué sirves?
Dije de la risa: Es locura; y del placer: ¿Qué logra esto?
Es una tontería pasarse todo el tiempo sonriendo; no hacer más que divertirse no sirve de nada.
Dije a la risa: ¡desquiciada! Y a la alegría: ¿para qué sirves?
Porque es necedad reír todo el tiempo; ¿qué beneficio produce?
Dije de la risa: «Es locura»; y del placer: «¿Qué logra esto?».
Entonces dije: «La risa es tonta. ¿De qué sirve andar en busca de placeres?».
A la risa la considero una locura; en cuanto a los placeres, ¿para qué sirven?
A la risa dije: ¡Necia! Y al placer: ¿Qué logras?
A la risa dije: “¡Eres locura!”; y al placer: “¿De qué sirve esto?”.
Y concluí que divertirse es una locura, y que los placeres no sirven de nada.
A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto?
Y concluí que las diversiones son una locura, y que los placeres no sirven para nada.
Y concluí que las diversiones son una locura, y que los placeres no sirven para nada.
El versiculo Eclesiastés, 2:2 de La Biblia consiste en algo que es preciso tomar siempre en cuenta con el objetivo de hacer una reflexión acerca de él.Tal vez sería bueno preguntarse ¿Qué intentaba manifestarnos el Señor con el versículo Eclesiastés, 2:2? ¿Cuáles son los momentos de nuestro día a día en que seremos capaces de aplicar lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Eclesiastés, 2:2 de la Santa Biblia?
Meditar en torno a lo que se refiere el versículo Eclesiastés, 2:2 es un gran aporte que nos permite a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa cuestión es conveniente apoyarse en el versículo Eclesiastés, 2:2 todas y cada una de las veces que necesitemos una luz que nos guíe para saber cómo actuar o para traer paz a nuestros corazones y almas.
