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Eclesiastés, 2:8

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Eclesiastés, 2:8

Junté montones de oro y plata, tesoros que antes fueron de otros reyes y de otras provincias. Tuve cantores y cantoras, placeres humanos y concubina tras concubina.


Alleguéme también plata y oro, y tesoro preciado de reyes y de provincias; híceme de cantores y cantoras, y los deleites de los hijos de los hombres, instrumentos músicos y de todas suertes.


Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, de los deleites de los hijos de los hombres, y de toda clase de instrumentos de música.


Amontoné también plata y oro, y preciados tesoros dignos de reyes y de provincias. Me hice de cantores y cantoras, y de toda clase de instrumentos musicales, y gocé de los placeres de los hijos de los


Amontoné también plata y oro, y tesoro preciado de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, y todos los deleites de los hijos de los hombres, instrumentos músicos y de todas suertes.


Allegueme tãbiẽ plata y oro, y thesoro preciado de reyes y de prouincias. Hize me cantores, y cantoras; y todos los deleytes de los hijos de los hombres, Cymphonia y Cymphonias.


Junté montones de oro y plata, tesoros que antes fueron de otros reyes y de otras provincias. Tuve cantores y cantoras, placeres humanos y concubina tras concubina.


Junté montones de oro y plata, tesoros que antes fueron de otros reyes y de otras provincias. Tuve cantores y cantoras, placeres humanos y concubina tras concubina.


Acumulé plata y oro y una fortuna proveniente de reyes y provincias; me procuré cantores y cantoras, placeres humanos y un harén de concubinas.


Reuní también para mí plata y oro y el tesoro de los reyes y de las provincias. Me proveí de cantores y cantoras, y de los placeres de los hombres, de muchas concubinas.


Junté mucha plata, oro y posesiones dignas de un rey. Los cantantes, tanto hombres como mujeres, cantaban para mí. Disfruté de lo que todo hombre puede desear, pues tuve relaciones con muchas mujeres.


Acumulé plata y oro y una fortuna proveniente de reyes y provincias; me procuré cantores y cantoras, placeres humanos y un harén de concubinas.


Luego compré esclavos y esclavas, y otros nacieron en mis propiedades. Crie grandes manadas y rebaños, más que cualquiera de los reyes que me precedieron. Recaudé plata y oro como tributo de muchos re


Reuní también plata y oro para mí y el tesoro de los reyes y de las provincias. Me proveí de cantores y cantoras, y de los placeres de los hombres, de muchas concubinas.


Junté grandes cantidades de plata y de oro, el tesoro de muchos reyes y provincias. Contraté cantores estupendos, tanto hombres como mujeres, y tuve muchas concubinas hermosas. ¡Tuve todo lo que un ho


Amontoné oro y plata, y tesoros que fueron de reyes y provincias. Me hice de cantores y cantoras, y disfruté de los deleites de los hombres: ¡formé mi propio harén!


Acumulé plata y oro para mí, y tesoros de reyes y provincias. Contraté cantores y cantoras, Y los placeres de los hombres: muchas concubinas.


Acumulé también plata y oro para mí, y tesoros preciados de reyes y de provincias. Me proveí de cantantes, tanto hombres como mujeres; de los placeres de los hijos del hombre, y de mujer tras mujer.


Acumulé plata y oro, y tesoros que antes fueron de otros reyes y provincias. Tuve cantores y cantoras, y disfruté de los placeres humanos, ¡habidos y por haber!


Alleguéme también plata y oro, y tesoro preciado de reyes y de provincias; híceme de cantores y cantoras, y los deleites de los hijos de los hombres, instrumentos músicos y de todas suertes.


Llegué a tener montones de oro y plata, y me quedé con las riquezas de otros reyes y de otras naciones. Tuve a mi servicio hombres y mujeres que cantaban para mí, y gocé de todos los placeres humanos,


Llegué a tener montones de oro y plata, y me quedé con las riquezas de otros reyes y de otras naciones. Tuve a mi servicio hombres y mujeres que cantaban para mí, y gocé de todos los placeres humanos,


Hay que tomar continuamente en consideración el versículo Eclesiastés, 2:8 de La Sagrada Biblia para hacer una reflexión en torno a él.Quizás deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de manifestarnos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Eclesiastés, 2:8? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida diaria en que podemos recurrir a lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Eclesiastés, 2:8 de Las Sagradas Escrituras?

Hacer un análisis profundo en relación con el versículo Eclesiastés, 2:8 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa razón es útil apoyarse en el versículo Eclesiastés, 2:8 todas las veces que nos pueda servir de guía de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer la paz a nuestro espíritu.