<

Ezequiel, 40:8

>

Ezequiel, 40:8

El hombre midió el vestíbulo que daba entrada al templo, y el vestíbulo medía cuatro metros. Había dos pilastras de un metro de grueso.


Midió asimismo la entrada de la puerta por de dentro, una caña.


Midió asimismo la entrada de la puerta por dentro, una caña.


Midió asimismo la entrada de la puerta por dentro, que era de una caña.


Midió asimismo la entrada de la puerta por dentro, de una caña.


Y midió la entrada dela puerra por dedentro, de vna caña.


El hombre midió el vestíbulo que daba entrada al templo, y el vestíbulo medía cuatro metros. Había dos pilastras de un metro de grueso.


El hombre midió el vestíbulo que daba entrada al templo, y el vestíbulo medía cuatro metros. Había dos pilastras de un metro de grueso.


Después midió el vestíbulo del pórtico por la parte interior


Entonces midió el vestíbulo de la puerta, hacia el interior, y tenía una caña.


Midió el vestíbulo interior de la entrada


Después midió el vestíbulo del pórtico por la parte interior


Cada una de estas habitaciones era cuadrada, de tres metros con quince centímetros de lado con una distancia de dos metros con sesenta y dos centímetros entre cada una de ellas.


Entonces midió el vestíbulo de la puerta, hacia el interior, y tenía una caña (3.2 metros).


También midió la antesala de la entrada.


Luego midió el vestíbulo de la puerta


Midió también la entrada de la puerta por dentro, tres metros.


Asimismo, midió el vestíbulo de la puerta


Midió también por dentro la entrada de la puerta, y medía tres metros


Midió asimismo la entrada de la puerta por de dentro, una caña.


El hombre midió el salón, y resultó que tenía cuatro metros de largo por diez de ancho. La puerta de entrada al salón resultó tener cinco metros de ancho. Las paredes de este salón tenían ventanas. Lu


El hombre midió el salón, y resultó que tenía cuatro metros de largo por diez de ancho. La puerta de entrada al salón resultó tener cinco metros de ancho. Las paredes de este salón tenían ventanas. Lu


El versiculo Ezequiel, 40:8 de La Santa Biblia es algo que es aconsejable tomar continuamente en cuenta con el fin de hacer una reflexión sobre él.Probablemente sería acertado cuestionarse ¿Qué intentaba decirnos Dios con el versículo Ezequiel, 40:8? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria seremos capaces de aplicar aquello que aprendemos gracias al versículo Ezequiel, 40:8 de la Santa Biblia?

Reflexionar en relación con el versículo Ezequiel, 40:8 nos ayuda a ser mejores personas y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por eso es útil servirse del versículo Ezequiel, 40:8 en todas aquellas ocasiones en que nos pueda servir de guía para saber cómo actuar o para traer la paz a nuestras almas.