Recuerdo mi tristeza y soledad, mi amargura y sufrimiento
Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel.
Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel
Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel.
Acuérdate de mi aflicción y de mi lloro, del ajenjo y de la hiel.
¶ Zain Acuerdate de mi afflicion, y de mi lloro; del axenxo, y de la hiel.
Recuerdo mi tristeza y soledad, mi amargura y sufrimiento
Recuerdo mi tristeza y soledad, mi amargura y sufrimiento
Recuerda mi pena amarga que es ajenjo envenenado.
Acuérdate de mi aflicción y de mi vagar, del ajenjo y de la amargura.
Recuerda que estoy triste y no tengo hogar. Recuerda la bebida amarga y el veneno que me diste.
Recuerda mi pena amarga que es ajenjo envenenado.
¡Oh, acuérdate de que ando sin saber adonde ir y afligido, con mucho dolor!
Acuérdate de mi aflicción y de mi vagar, Del ajenjo y de la amargura.
Recordar mi sufrimiento y no tener hogar es tan amargo que no encuentro palabras.
Recuerda que estoy afligido y ando errante, que estoy saturado de hiel y amargura.
Recuerda mi aflicción y mi angustia, El ajenjo y la hiel.
Acuérdate de mi aflicción y de mi desamparo, del ajenjo y de la amargura.
Tan amargo como la hiel es pensar en mi aflicción y mi tristeza
Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del ajenjo y de la hiel.
L os más tristes recuerdos me llenan de amargura.
L os más tristes recuerdos me llenan de amargura.
Debemos tener en todo momento presente el versículo Lamentaciones, 3:19 de los Textos Sagrados que componen la Biblia con el objetivo de reflexionar acerca de él.Tal vez deberíamos preguntarnos ¿Qué quiso proponernos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo Lamentaciones, 3:19? ¿En qué coyunturas de nuestra vida cotidiana tenemos la oportunidad de recurrir a lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Lamentaciones, 3:19 de la Santa Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación en relación con el versículo Lamentaciones, 3:19 nos ayuda a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por ese motivo es útil recurrir al versículo Lamentaciones, 3:19 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen para saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestro espíritu.