San Mateo, 26:30
Después de cantar los salmos, se fueron al Monte de los Olivos.
Y habiendo cantado el himno, salieron al monte de las Olivas.
Y cuando hubieron cantado el himno, salieron al monte de los Olivos.
Después de haber cantado el himno, salieron al Monte de los Olivos.
Y habiendo cantado un himno, salieron al monte de las Olivas.
Y quando ouieron dicho el hymno, ſalieron àl monte de las Oliuas.
Después de cantar los salmos, se fueron al Monte de los Olivos.
Después de cantar los salmos, se fueron al Monte de los Olivos.
Cantaron después el himno y salieron hacia el monte de los Olivos.
Y después de cantar un himno, salieron hacia el monte de los Olivos.
Después cantaron una canción de alabanza y se fueron al monte de los Olivos.
Cantaron después el himno y salieron hacia el monte de los Olivos.
Después de estas palabras, cantaron un himno y se fueron al monte de los Olivos.
Y después de cantar un himno, salieron hacia el monte de los Olivos.
Luego cantaron un himno y salieron al monte de los Olivos.
Después de cantar los salmos, salieron al monte de los Olivos.
Después de cantar un himno, salieron hacia la Montaña de Los Olivos.
Y después de cantar un himno, salieron al monte de los Olivos.
Luego de cantar el himno, fueron al monte de los Olivos.
Y habiendo cantado el himno, salieron al monte de las Olivas.
Después de eso, cantaron un himno y se fueron al Monte de los Olivos.
Después de eso, cantaron un himno y se fueron al Monte de los Olivos.
El versiculo San Mateo, 26:30 de La Biblia consiste en algo que es preciso tomar constantemente en cuenta de manera que podamos meditar en torno a él. ¿Qué quiso manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo San Mateo, 26:30? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida cotidiana en que tenemos la oportunidad de hacer valer lo que hemos llegado a saber gracias al versículo San Mateo, 26:30 de la Santa Biblia?
El hecho de reflexionar en relación con el versículo San Mateo, 26:30 nos resulta fundamental para llegar a a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, por esa razón es aconsejable apoyarse en el versículo San Mateo, 26:30 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos una luz que nos guíe y así saber cómo proceder o para traer la paz a nuestras almas.
