Poco después, los que estaban allí se acercaron a Pedro y le dijeron: —Seguro que tú también eres uno de ellos. Hasta en tu manera de hablar se te nota.
Y un poco después llegaron los que estaban por allí, y dijeron á Pedro: Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu habla te hace manifiesto.
Un poco después, acercándose los que por allí estaban, dijeron a Pedro: Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre.
Un poco después, acercándose los que por allí estaban, dijeron a Pedro: —Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre.
Y un poco después llegaron los que estaban por allí, y dijeron a Pedro: Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu habla te hace manifiesto.
Y desde à vn poco llegaron losque seruian, y dixeron à Pedro, Verdaderamente tambien tu eres deellos: porque aun tu habla te haze manifiesto.
Poco después, los que estaban allí se acercaron a Pedro y le dijeron: —Seguro que tú también eres uno de ellos. Hasta en tu manera de hablar se te nota.
Poco después, los que estaban allí se acercaron a Pedro y le dijeron: —Seguro que tú también eres uno de ellos. Hasta en tu manera de hablar se te nota.
Algo más tarde se acercaron a Pedro unos que estaban allí, y le dijeron: — Pues no cabe duda de que tú eres de los suyos; el acento mismo te delata.
Y un poco después se acercaron los que estaban allí y dijeron a Pedro: Seguro que tú también eres uno de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre.
Un poco después, los que estaban allí se le acercaron y le dijeron: —Tú realmente eres también uno de ellos, se nota por la forma en que hablas.
Algo más tarde se acercaron a Pedro unos que estaban allí, y le dijeron: —Pues no cabe duda de que tú eres de los suyos; el acento mismo te delata.
Pero al poco rato se le acercaron los que por allí andaban y le dijeron: ―No puedes negar que eres uno de los discípulos de ese hombre. ¡Hasta tu manera de hablar te delata!
Un poco después se acercaron los que estaban allí y dijeron a Pedro: «Seguro que tú también eres uno de ellos, porque aun tu manera de hablar te descubre».
Un poco más tarde, algunos de los otros que estaban allí se acercaron a Pedro y dijeron: —Seguro que tú eres uno de ellos; nos damos cuenta por el acento galileo que tienes.
Poco después se acercaron a Pedro los que estaban allí y le dijeron: —Seguro que eres uno de ellos; se te nota por tu acento.
Después, se acercaron los que estaban por ahí y dijeron a Pedro: En verdad tú también eres de ellos, porque hasta tu manera de hablar te delata.
Y poco después se acercaron los que estaban por allí y dijeron a Pedro: —Verdaderamente, tú también eres de ellos, porque aun tu modo de hablar te descubre.
Un poco después, los que estaban por allí se acercaron a Pedro y le dijeron: «Sin lugar a dudas, tú también eres uno de ellos, porque hasta tu manera de hablar te delata.»
Y un poco después llegaron los que estaban por allí, y dijeron á Pedro: Verdaderamente también tú eres de ellos, porque aun tu habla te hace manifiesto.
Un poco más tarde, algunos de los que estaban por allí se acercaron a Pedro y le dijeron: —Estamos seguros de que tú eres uno de los seguidores de Jesús; hablas como los de Galilea.
Un poco más tarde, algunos de los que estaban por allí se acercaron a Pedro y le dijeron: —Estamos seguros de que tú eres uno de los seguidores de Jesús; hablas como los de Galilea.
El versiculo San Mateo, 26:73 de La Biblia consiste en algo que hay que tomar en todo momento en cuenta para analizarlo y pensar en torno a él.Probablemente sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo San Mateo, 26:73? ¿En qué ocasiones de nuestro día a día podemos poner en práctica lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo San Mateo, 26:73 de Las Sagradas Escrituras?
Discurrir y recapacitar en relación con el versículo San Mateo, 26:73 nos es de gran ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es aconsejable acudir al versículo San Mateo, 26:73 todas y cada una de las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir para saber en qué forma acturar o para traer la paz a nuestros corazones.