Salmos, 18:41
41 (42) Pedían ayuda, y nadie los ayudó; llamaban al Señor, y no les contestó.
Clamaron, y no hubo quien salvase: Aun á Jehová, mas no los oyó.
Clamaron, y no hubo quien salvase; Aun a Jehová, pero no los oyó.
Clamaron, y no hubo quien salvara; aun a Jehová, pero no los oyó.
Clamaron, y no hubo quién se salvara; aun al SEÑOR, mas no los oyó.
Y diſteme la ceruiz de mis enemigos: y à los que me aborrecian, destruy.
y que delante de mí huyeran mis enemigos. Así pude destruir a los que me odiaban.
41 (42) Pedían ayuda, y nadie los ayudó; llamaban al Señor, y no les contestó.
Pones en fuga a mis enemigos y yo aniquilo a mis adversarios.
Clamaron, mas no hubo quién los salvara; aun al SEÑOR clamaron, mas no les respondió.
Ellos pidieron ayuda, pero nadie fue en su auxilio. También llamaron al SEÑOR, pero él no les respondió.
Piden auxilio y no hay quien los salve, claman a Dios y no les responde.
Gritaron pidiendo ayuda, pero nadie se atrevió a rescatarlos; clamaron al SEÑOR, pero él se negó a responderles.
Clamaron, pero no hubo quién los salvara; Aun al SEÑOR clamaron, pero no les respondió.
Pidieron ayuda, pero nadie fue a rescatarlos. Hasta clamaron al SEÑOR, pero él se negó a responder.
Pedían ayuda; no hubo quien los salvara. Al SEÑOR clamaron, pero no les respondió.
Clamaron, pero no hubo quien los librara, Aun a YAVé, pero no les respondió.
Clamaron pero no hubo quien los salvara. Clamaron al SEÑOR pero él no les respondió.
Clamaron a ti, Señor, pero no los atendiste; ¡no hubo nadie que los ayudara!
Clamaron, y no hubo quien salvase: Aun á Jehová, mas no los oyó.
41 (42) A gritos pedían ayuda, pero nadie fue a salvarlos. Hasta de ti pedían ayuda, pero tampoco tú los salvaste.
41 (42) A gritos pedían ayuda, pero nadie fue a salvarlos. Hasta de ti pedían ayuda, pero tampoco tú los salvaste.
El versiculo Salmos, 18:41 de La Sagrada Biblia consiste en algo que nos conviene tomar constantemente en cuenta con el propósito de reflexionar acerca de él. ¿Qué pretendía manifestarnos el Señor con el versículo Salmos, 18:41? ¿En qué coyunturas de nuestro día a día tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que aprendemos gracias al versículo Salmos, 18:41 de La Biblia?
Hacer un análisis profundo en torno a lo que se refiere el versículo Salmos, 18:41 es un gran aporte que nos permite a ser mejores personas y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa cuestión es conveniente apoyarse en el versículo Salmos, 18:41 todas y cada una de las veces que necesitemos una luz que nos guíe para saber en qué forma acturar o para traer la serenidad a nuestras almas.
